Luna?

No era su luz sobre el cielo
un disco de plata,
ni siquiera en el bosque
por entre las hojas,
su luz cual rayo se filtraba.
No era un queso
que en el fondo de un pozo flotaba,
ni con las olas del mar cada noche rielaba.

Era, eso si, manos nudosas,

que en el hospital a todos ayudaban.

Rafa Marín

Dioses

Esto es todo lo que soy para Ti,
pues entonces sea.
Seré la devastación en la tierra,
quinto jinete que se aferra al dolor sin fin. 

Seré hierro que soporta los golpes en la forja.

Seré brazo de tu venganza
y en mi pecho el corazón dejará de latir.
Perdición para mi pobre alma,
último rincón que de mi ser rendí.

Rafa Marín

Sirenas

Si del mar con mil sirenas
solo una me quisiera salvar.
Dejaría mís oídos sin cera
y mis manos sin atar.
Mas hoy, en esta eterna espera,
quizás mi boca debiera callar.
Ojos que la belleza observan
y cabeza que no se detiene a pensar.
Un juego de versos en letras,
poema que que entre caricias,
hoy quisiera poder terminar.
Viajero fui por una reina
sin Ítaca a la que regresar.

Rafa Marín

Bajo el luminoso arco

Bajo el luminoso arco
que la fría luz recorta,
dos extasiadas sombras
sus manos hacen lazos.
Al cielo que las acusan,
en silencio tan osadas
desafian entre miedos,
ese amor que los asusta.
Ella cofia blanca y pura,
él negra sotana de credo.
Amantes que en un beso,
mil tabúes allí conjuran.
El atrio, el azul del cielo
y el sacro y duro silencio,
se vuelven todos dulzura,
quién llamo pecado esto?
Alma que a otra alma jura
ser de ambos amor eterno.
Y allí, en el rincón luminoso,
del más frío y largo invierno,
una voz entrecortada suspira
y la otra en ella encierra un te quiero.

Rafa Marín

El anillo

Entre la hojarasca se esconde,
brillo que de sí quiere ocultar,
un anillo y su grabado nombre,
que aquella niña no lo quiso llevar.
Baratija que la fortuna hallará,
el azar de caprichosos dioses,
nada dirá de aquellos dolores
que en su rechazo padeció el galán.
Una historia y sus desamores,
sin honra que se deba guardar,
sin reja ni iluminados balcones,
un pequeño anillo nada más.
Sobre él quizás escriba canciones,
ese chico que jamás la olvidará,
niña de sonrisa blanca, su rompecorazones.

Rafa Marín

Tristeza

Me vienes a ver,
otra vez condenada compañera,
ayer que de ti me olvidé,
pero solo fue mi pequeña quimera.
Hoy me dijo adiós una amiga,
no una cualquiera,
he sentido su dolor,
pero es mi alma la que pena.
Espero que el olvido le llegue
y que mi nombre nunca esté en su voz,
los demonios también sufren,
aunque nadie lo crea.
No me dio su perdón,
fueron muchas sus penas,
por qué he de necesitarlo yo?
Qué es un infierno sin su condena?

Rafa Marín

Despertar

Me despierto con esa incertidumbre
del que empieza su vida sin pasado.
No me pregunto quien soy,
más bien quién está a mi lado.
Su sonrisa me hace desconfiar,
esa ternura en los ojos
y la calidez de sus manos,
acaso ya nos conocíamos ayer;
cuando enterraba mis manos en el barro?
Toda mi vida se esfumó sin entender
que los miedos nos hacen humanos,
vivir sin pretender ser Héctor ni Aquiles,
sólo uno más de los muertos troyanos.
Así,
con esta insensatez me dejo arrastrar,
invitado al baile feroz que es soñarnos.

Rafa Marín

Golondrinas

Enlutadas del vértigo,
entre cornisas y arcos,
durmientes de los aleros.
Ellas que son primavera
recorren hoy mis sueños,
ideas siempre peregrinas,
de esta vida que no
entiendo.
Del otoño son la ausencia,
en verano ocaso sediento,
rápidas entre los campos,
y africanas del invierno.
Para el poeta melancólicas,
efímero canto en su verso;
para mis ojos son fantasmas
de silencioso y grácil vuelo.
Golondrinas ahora fatigadas,
sin cálido refugio ni consuelo,
un instante en mi palabra
y un mundo de recuerdos.

Rafa Marín

Un año ha pasado

Sólo un año ha pasado
y ya casi no recuerdo, 

fueron unos momentos,
que tiempo se ha llevado.
Me acogió en su seno,
el calor tibio del abrazo,
alma que todo ha dado,
con su silencio sereno.
Pienso, como no hacerlo,
aquel desierto desolado
y nadie que pueda verlo.
Ha pasado todo un año,
grito brutal de mi pecho,
la parca por ti ha llegado.

Rafa Marín

Momentos (9)

Asomada está mi luna
a esta ventana del soñar.
Entre las realidades
que nos mienten
y sueños que son verdad.
Paradojas entre hadas
y los esquivos duendes,
entre muros de piedra
y brillantes hojas de cristal.
Otoños que se mueren
y que no serán nunca; nuestra feliz Navidad.

Cuantas noches hacen falta
para dejar de soñar?
Cuántos genios y cuántas lámparas,
para dejar de desear?
Cuántos miedos y cuántos monstruos,
para que no me cueste gritar?
Cuántas palabras, cuántos silencios,
cuánta maldita verdad?

Escondida entre mis letras
hay una vida y su verdad, sueño que cada día me alcanza
y que cada noche me quiere matar.
Escondida entre las palabras,
perdición de mi realidad,
hay un mundo que a nadie conoce
y que mi boca anhela destapar.

Rafa Marín

Momentos (8)

No,
no me arrepiento de nada.
Me gusta vivir y no ser del montón.
Correrías destempladas,
noches de solitaria pasión.
Entre los dientes un cuchillo afilado,
rojo clavel del reventón
y en la cabeza su impenitente tocado; siempre perdida entre los muros del paredón.

Hoy retomo la actividad laboral...
mis ojos y mis manos,
se cansaron de ver y no tocar.
Ellos siempre niños mercenarios,
ellas, como perros cansados de ladrar.

Nace el sol con rutilante brillo,
que va desde su amanecer
pintado de amarillo.
Se esconde ya viejo
y apocado
entre los hermosos rojos y los anaranjados.
Nace con la vitalidad de un chiquillo
y se acuesta cual viejo cansado.

Rafa Marín

Pensamiento

Estamos en manos de dioses perversos.

Esclavos de esta innecesaria  necesidad.

La odisea se a vuelto un viaje en solitario.

Twitter; un sueño de pájaros azules.

El amor...un intercambio de mensajes entre dos mundos opuestos.

Tú, paradigma de una aventura a los infiernos.

Yo, desecho de un vulgar coito entre dos extraños.

Verdad y mentira, sueño y realidad de un mundo sordo.

Rafa Marín

Momentos (7)

Ya corre sobre la corriente de plata la hoja dorada.
Ya sube a su cenit de estrellas este sueño de las almohadas.
Ya bajan al porche las dulces palabras.
Ya pasó la media noche y en el claro del bosque juegan las hadas.
Ya se durmió mi miedo...acunado por el canto de las cañas.

Pende del cielo una luna que crece,
y entre las nubes asoma coqueta.
Blanca su cara sin manos que en mi espalda un corazón dibujen.
Pende tan sola y callada,
tan altiva y lejana; quiere que mis versos la busquen,
quiere mis ojos que tiemblan como polillas en la madrugada.

Rafa Marín

Momentos (6)

Que distante
y maldita hora,
tan llena de mares
que no te nombran.
Acaso por amarte,
mi alma ha de esperar
ese momento que
sin tú y yo reza,
para poder ser un día gloria?
Mil versos nada más
que en esta trágica comedia,
al inglés muerto rememora,
por no ser sólo
una triste sombra.

No te creo destino,
ya te creí una vez
y desde entonces mal vivo.
Atado a esta necesidad
que solo me lleva cual alud
en su eterno rodar.
Ya no me fío, mil sirenas
y un solo eterno cantar,
sueños de peregrinos,
sin Penélope ni reino
al que puedan regresar.

No, no gritaré tu nombre,
ni pondré coronas de espinas
en esta testa
en la que eres redoble.
No diré nunca más
ese obcecado, anda ven...
porque ya no sabrás a donde.

Rafa Marín

Momentos (5)

Cuando la noche se llena con el silencio,
cuando hasta las estrellas callan;
busco entre mi recuerdos un hueco,
para esta memoria que tanto falla.
Nunca fue un día nuestro,
para qué vamos a hacer zarandajas;
te quise y también ahora te quiero.
Como sólo queremos los canallas.

No mires!
Hay frío en tus ojos,
una humedad salada,
el dolor de tanto añoro.
No mires!
La noche está llegando,
no lucen las flores de loto,
cantará la madrugada.
No mires!
Los sueños están rotos,
las vitrinas vacías,
como bocas sin piropos.
No mires!
Mientras el sueño se escapa
corriendo.

Rafa Marín

Momentos (4)

Rozan cual tímido susurro
mis dedos tu piel,
alas de mariposa
que temen con su osadía
la magia romper.
Y en mis ojos
de perdida mirada,
un anhelante hoy
por ti quiero ser;
bufón absurdo,
enamorado pirata
o sonoro cascabel.

Huele esta noche
a lluvia sobre los campos,
a macetas con jazmines
y a rosas de antaño.
Huele la noche
a brisa que está rolando,
a trapo que flamea
y a jardín de geranios.

Humanidad
Entre silencios y cabizbaja,
anda esta humanidad,
sin un corazón que palpite,
todo se hizo en ella extremidad.
Las luchas en las que te perdiste,
no nos trajeron ni pizca de igualdad.
Todo fueron interesados envites, moralejas para engañar.
Algunos aún en ella resisten.

Rafa Marín

Ideas

Vuela imaginación;
sueña su sueño y bésala
como sólo besamos los dos.
Con hambre atrasada,
como besan los lobos y las hadas.

Asoma y dice que ya cumplió 18;
asoma tímida como una niña triste que lo perdió todo.
Tan callada tan desconocida...

No quiero imaginar tu dolor que conozco.
Ese siempre queriendo escapar
sin tener ni fuerzas ni aliento.

Como un cielo ondulante
que huele a madera añeja
y a caña,
que cuece azúcar moreno. Como un infierno que arde
con el sabor de los recuerdos.

Ningún viaje es tan solitario como aquel que se inicia
en busca de uno mismo.

Rafa Marín

Poema

Ay!
Que de saber y no tener,
se me está incendiado el alma. 

Como fuego de dragón 

cubriéndome de escamas.
Real quiero la vida...real.
como piel en carne viva
y no como estatuas sin pedestal.
Y lo quiero todo, hasta el final, 

hasta que el destino decida
o se seque el mar.

Rafa Marín

Naturaleza humana?

Arrastro esta naturaleza
de los dioses malditos,
la del castigo severo
y por siempre merecido.
Hay alguien qué  quiera mirar?
Sólo queda un profundo vacío.
Ya suben, son las nubes negras,

la hipocresía que repta
sobre unas barrigas llenas,
es el dolor de esta sociedad enferma

y agónica que miro.
Pero yo solo soy un pobre loco,
el peligroso animal que piensa.
Soy ese insaciable mal,
que entre las ruinas curiosea
y se pregunta el oscuro porqué.

Rafa Marín

Sobre el papel

Sobre el papel la tinta se derrama,
que aún no siendo letra impresa,
nadie dirá ya, que estas
no son palabras enamoradas.
Que suerte la de aquel,
que sin sentir nada,
puso el colofón de su firma,
sobre un libro de poemas
que otro para él sangró,
mientras en silencio amaba.
Así, sin fama ni relumbrón,
fue sus sueños esparciendo
en su anónima y pura dicción.
Versos que sacian como agua.
Pues su canto, como un Cyrano,
en otra cara, en otros labios,
más por cobardía que pudor,
escribió para su ingrata amada.

Rafa Marín

Gritaría

Gritaría tu nombre si pudiera,
en esta oscuridad sin caricias
sin parques que te esperan. 

Gritaría en un café sin luces, 

junto al ventanal con mesa,
entre papeles llenos de letras.
Gritaría que junto a mi vinieras, 

que tomaras mis manos, mi boca
y lo que de mi vida hoy quisieras.
Gritaría esta sinrazón delatora,
como gritan al paredón los ojos
que su vida por amor entregan.
Gritaría que el amor no espera,
que soñar no es vida ni muerte,
que amar es una verdad sincera.
Gritaría...si tú me lo pidieras.

Rafa Marín

Quién paga?

Quién paga?
El vapor asciende
como una medusa
de entre los escombros.
La lluvia no alivia
este acre sabor
a muerte y miedo.
Quién paga?
La sangre seca,
los ojos muertos,
la niña desmadejada
en la cochambre
de una colchoneta rota.
Quién paga?
La luces de neón,
con su brillo miran
sin dar ningún calor,
decapitan inocencias,
curiosidad y demonios.
Quién paga?
No hay ya verdades,
sólo estas horas vacías,
que se asoman ahora
como perros hambrientos.

Rafa Marín

Sin ti

El temblor de mi labios
y el frío que me toma
con dureza las manos.
El mirar sin querer ver,
el sentir de esta mirada
que quiere ser huérfana.
Hoy siento esa paz de los campos
escondidos bajo la nieve,
la paz después del bombardeo, 

ese silencio que sólo tú conoces, 

cuando nos miramos callados
en nuestros ojos de papel.
La mañana despertó jirones,
unos de niebla, otros de cuerpos;
todos con el dolor de lo absurdo,
como si esto fuese necesario.
La mañana me habla en pasado,
de infancia triste y ausente,
de sueños que son ya olvido
y de un deseo que murió de hambre.

Rafa Marín

Reflejos

Sobre el ángulo superior
se desdibuja un arco multicolor,
miro curioso y cansado sonrío,
pasa la mañana y entre saludos 

y un silencio me dejo atrapar
por esta tibieza de la desgana.
Sueño despierto, la paz de mis ojos
se llevó los viejos anhelos.
Hay, por decirlo así, una pereza 

en las horas que recorren los cielos.
Las ausentes nubes que no pasan,
la hoja que sin brisa tremola,
la tela de araña sin rocío ni brillo,
la espera...tan amable, tan feliz,
tan falta de fe y de ilusiones.

Rafa Marín

Aceras nocturnas

Crecen las aceras con la noche,
se visten con esa soledad
de las camas de cartón.
Los pasos por ellas se vuelven presurosos,
como estrellas fugaces en la niebla.
Las aceras nocturnas son,
como playas desiertas en mares tormentosos,
siempre sin huellas que la marea pueda barrer.
Las aceras nocturnas son,
como el camino de las sombras,
esas que se encogen
y alargan bajo la luna artificial.
Las aceras nocturnas,
siempre silenciosas y nunca en paz.

Rafa Marín

La ciudad despierta

La noche se despierta,
vibrante y lúcida.
Trae de la mano furia,
esa insensatez ya vieja,
la de los portales vacíos,
la de manteles blancos
y huevos cocidos.
Suenan...rugen y gimen,
los escapes tóxicos
y las barrigas con hambre.
Pero la ciudad está despierta,
para que la caminen mis botas viejas.
Quedan atrás bocas de metro,
cloacas sin ninguna humanidad,
son el canto infame de la ciudad 

que a la noche llama cuando despierta.
Mira la joven con sonrisa traviesa,
se relame ante esa llamada,
noche entre aceras que corren
sin descanso hacia la madrugada.

Rafa Marín

Adiós

Adiós olas blancas,
adiós cielos amarillos.
Adiós bares con terraza,
adiós cafés urgentes,
adiós vasos de agua.
Adiós bolardos,
adiós noches sin sábanas.
Adiós, adiós, adiós...
a esta tarde que avanza,
de plata mil cascabeles
y en mis oídos voz callada.
Adiós sueños de lubina,
que con las olas jugaba.
Adiós manos tan presentes,
como la luz de la aurora.

Rafa Marín

El infierno de tu mirada

Al abismo de tu mirada
con cautela me asomo,
negros ojos negros,
que con su brillo
me desatan los demonios.
Hoy los quiero míos,
como a la brisa de este invierno,
como a las olas del mar,
como al perfume del limonero.
Pero son tus ojos un abismo,
negros ojos negros,
como asomarse a la noche
escondido en estos miedos,
como buscar un refugio
en mitad de mil incendios.

Rafa Marín

Botas de agua

Arrinconadas están ahora
y sin su plástico brillo,
unas botas que fueron moradas
y que tanto gustaron
a aquellos ojos de niño,
esperan que alguien las recuerde en su exilio.
Ahora, ya por el tiempo olvidadas,
una araña entre las dos hizo su nido.
La luz de cada mañana entrará por esos desencajados postigos
y así, con el silencio sepulcral, ellas, las pequeñas botas de plástico,
sonarán con charcos de otoño y pies de niño.

Rafa Marín

Rencor

De tu fuego de hielo,
el rencor se cubrió.
Aceras marchitas,
pisadas de barro
y manos mendigas.
Los puentes con niebla,
las aguas cansinas,
el miedo sube a los cielos.
Transeúntes y policías,
dueños de esta función;
te reclaman, que osadía,
no duermas sobre cartón.
Asoma ahora tu justicia,
a golpe de vino y tetrabrick,
todos te miran y te sientes,
como jamás te pudiste sentir;
amo y señor de esta acera
que de frío te verá morir.

Rafa Marín

Abres tu ventana

Abres tu ventana
de imperfectas esquinas,
de sueños lejanos
y eterna sonrisa.
Abres esos ojos,
que sin querer al mío miran
y se vuelve todo del revés; 

primaveras y otoños
y este mundo que gira y gira.
Abres las manos
libres al fin de la codicia,
recital de duro trabajo,
sarmientos de la vid,
siempre reclamando justicia.
Ofreces tu piel
canto sincero de la edad
que entre pliegues te habita,
blanco e inmaculado dolor,
noches que mi deseo mancilla.

Rafa Marín

La tarde me trae

La tarde me trae,
entre esperas tu recuerdo. 

Momentos de delicadeza 

abrazando mil sueños.
Un mar que es en sus brillos; 

plata de olas, incesante meneo.
La tarde que sin de ti saber pasa,
no tengo tus manos inquietas
a la sombra del limonero.
La tarde, ya tan avanzada, 

quiere llenar de estrellas el cielo,
quiere que la luna salga,
para tener de ti un suspiro
y en su latir, el olvidado te quiero.

Rafa Marín

Una noche cualquiera

Sentado en la cama buscas tu perdición,
no te dejó la vida más que mala reputación.
Entregaste tus días a esas malas esquinas;
siempre sedientas del cariño dado de corazón,
sombras perpetuas, invisibles los ojos espían.
La botella tumbada lágrimas que riegan,
miedos, anhelos, sueños y soledad de rincón.
Un claro de luna da luz a tus pupilas,
mientras llegan mil demonios y el temido dolor.

Rafa Marín

JUSTICIA

¡Justicia!
Tan lejana es la utopía,
escondida en la memoria,
tantas amargas lágrimas,
almas que ayer la pedían.
¡Justicia!
Sin la opulenta oratoria,
miel, leche que no se agria
con el raudo paso de los días.
Florecido brote sin mácula.
¡Justicia!
Por los débiles tan querida,
por los justos siempre ansiada,
de la boca del poder huida...
Y para mis ojos sólo fábula.

Rafa Marín

Ayer

Sobre esta sombra
que todo lo cubre,
mil brillos hay,
el suyo se esconde.
Pasarán las horas,
son como semanas,
nadie hay que la nombre,
mi estrella fugaz.
Que fácil es despertar,
no tengo un sueño
que me invite a soñar.
Atrapado en esas dudas
que nadie comprende,
sin otra brillante luz
que me hiciera recapacitar,
tiré, cual reo que se sabe culpable,
las ganas que tenía de libertad. 

No tengo nada más
que mis lágrimas artificiales
y ese ya eterno...déjalo estar; 

siempre seré tu culpable.

Rafa Marín

Palabras

Palabras escribí yo,
con el grito de mi garganta.
Lobo que a la luna aulló,
para enamorar a un hada.
Palabras que la marea borro,
voces sin labios para cantarlas.
Lobo estepario que olvidó...
en Twitter mandan las hadas.

Rafa Marín

Despedida

Llega la oscuridad,
abrazo que espero,
no siento dolor ya,
pero si tengo miedo.

Sigue la vida sin mirar,
nadie quiere consejos,
mis botas para caminar
me llevaran muy lejos.

Carne soy de lupanar,
atrapado por mil fuegos,
sin volver la vista atrás.

Cada uno de mis sueños
sólo fue pedir un poco más,
no quise besar el suelo.

Rafa Marín

Pres polític?

Parla-li de las teves cadenes
al pare que està a l'atur,
parla-li del teu martiri
al nen que no ha sopat.
Parla'ls-li de la teva nuesa
als que viuen sense resguard. 

Parla'ls-li avui a les dones,
aquestes que estan matant.
Parla-li al que per una gallina
a la presó passarà dos anys.
Parla, digues que ets aquest poble,
al qual tant has enganyat.

Rafa Marín

Tú, mi viejo recuerdo

Entre las nieblas del ayer,
entre los miedos enterrados,
entre el querer y no poder,
¿cuántos años han pasado?

Ahora que estoy aquí, acabado,
ahora que jamás en ti seré,
corriendo voy de uno a otro lado,
sin más que mi vida por perder.

Soñando paz y siendo guerra,
atando mi boca que quiere ser,
para no hacer daño a quien amo.

Con cal y canto un muro haré,
que mis recuerdos hoy proteja
quizá mañana tiendas la mano.

Rafa Marín

¿Preso político?

Háblale de tus cadenas
al padre que está en paro, 

háblale de tu martirio
al niño que no ha cenado.
Háblale de tu desnudez
a los que viven sin resguardo. 

Háblale hoy a las mujeres,
esas que están matando.
Háblale al que por una gallina
en la cárcel pasará dos años.
Háblales, di que eres ese pueblo,
al que tanto has engañado.

Rafa Marín

Las cunetas de España

En las cunetas de mi España
florecen las más bellas amapolas,
con ese rojo que a nadie engaña,
un mar de sangre tan puro
que con la brisa se hace ola.
Hay una sed en las cunetas olvidadas,
una sed de justicia que el tiempo no apaga.
Hay un temblor en sus labios
al oír cada coche que hoy pasa.
Si, en estas cunetas tan nuestras,
en las que como ríos corrieron
las injusticias bañadas de lágrimas.
En ellas nadie deposita con amor
azucenas ni rosas ni lirios de agua.
En ellas crecen las flores silvestres
que silenciosas a la libertad le cantan.

Rafa Marín

Recuerdos de Madrid

Recuerdo de Madrid
muchas madrugadas,
las chicas de sonrisa fácil
y una promesa sin cumplir
en sus vacías miradas.
Recuerdo las terrazas,
verano en la Castellana. 

Recuerdo las últimas calles,
de lluvia y charcos grises,
de calzadas empedradas.
El olor de pan recién hecho
y panaderas de mirada feliz
y siempre de manos cansadas.
Recuerdo mis diarias carreras,
las paradas llenas de "patos"
y las putas junto a Montera. 

Recuerdo los bares de 24 horas, 

de menú y gentes siempre vivas;
recuerdo de Madrid sus discotecas.

Rafa Marín

La lluvia

La noche se ilumina
y del cielo por millones
caen las gotas pulidas.
La aceras entre prisas,
van haciendo mil ecos
de mis pasos que sin ti
solitarios hoy caminan.
La noche quiere ser lluvia,
caudal en las aceras.
La noche se descarga
con su insaciable furia,
mece las ramas de fuera.
La noche ilumina, colores,
la luz de las tormentas.
Resbalan por mi cara
recuerdos de otras lluvias,
cielos negros entre fuegos.
¿Por qué tanto mirar atrás,
si nada aquello nada ilumina?

Rafa Marín

Yo quisiera

Yo quisiera salir a bailar,
pero estas horas no me dejan,

madrugadas con sabor a pan
de las tahonas madrileñas.
Yo quisiera claro está,
ser ese zumbido en la colmena,
ambarina miel que pintará
tus labios cuando me besas.
Yo quisiera sin saber ya,
por qué tus ojos se quejan,
que si me dejas de mirar,
del cielo se van las estrellas.
Yo quisiera darte mucho más,
ser el viento de las cometas.

Rafa Marín

Ella fue y yo soy

Sucumbe la piedra
a la suave caricia del tiempo, 

como sucumben las almas
al vuelo de la palabra en verso,
sin hacerse notar llega
y así como tiempo se va.
Fue muro infranqueable
y sima insondable y profunda,
fue herida en mi carne
y aurora que despunta.
Fue quizás secreto a voces
y en mi mente eterna duda.
Cual liquen que rosea a la roca, 

abrigo en la tundra soy,
piel que te cubre si lloras
y también raíz profunda soy.
Dolor que te hiere y desgarra, 

sueño que con amor arrulla soy.
Fue ayer y presente en la bruma, 

fue en la noche faro brillante
que con su luz todo alumbra,
fue camino abierto en la espusura.
Es, lejano momento que me apura.

Rafa Marín

Tristeza sin tus ojos mamá

Mamá...
que doloroso es todavía el recuerdo.
Ver tu cara bañada en lágrimas,
saber que te empapaste de mi dolor.
Mamá...
ya no estas y no puedes consolarme,
ya por mí nunca más por fin sufrirás.
Mamá...
en la noche oscura supe de tu suerte,
me escondí, no quise que me vieran llorar.
Mamá...
tus manos frías, sentir la mirada de esa gente,
insensibles, como cuervos, como hijos sin paz.
Mamá...
se acerca el día fatídico en el que pude llorar,
que amanecer tan triste, un tren  que paró de repente.
Mamá...
lo sabías? Ayer hizo su primer examen Ricard.

Rafa Marín

On est seny?

Sota un nítid cel,
el dolor flama i reclama, 

insaciable de sense raó,
de sang i horror té ganes.
Volem partir aquesta societat
i amb banderes obrim rases. 

¿Les omplirem de morts?
O potser de parterres de flors
i fruiters tinguin ànimes?
Avui miro sense por
a la llum de la brillant matí.
Potser les orenetes no tornin,
perquè no podran batre les seves ales,
potser sigui la tristesa qui avui
en els seus nius ous incubarà.

Rafa Marín

¿Dónde estás cordura?

Bajo un límpido cielo,
el dolor llama y reclama, 

insaciable de sin razón,
de sangre y horror tiene ganas.
Queremos partir esta sociedad
y con banderas abrimos zanjas.
¿Las llenaremos de muertos?
¿O quizás de parterres de flores
y frutales tengan almas?
Hoy miro sin miedo a la luz
de la brillante mañana.
Quizás las golondrinas no vuelvan,
porque no podrán batir sus alas, 

quizás sea la tristeza quien hoy 

en sus nidos huevos incubará.

Rafa Marín

PPOLÍTICOS Y LA PATRIA

Abanderados de ocasión,
sin más pudor que el de sus manos llenas,
van largando su sermón,
en estas tan viejas y sucias querellas.
De leyes se dan un "jartón",
y luego hacen que la prensa se llene de esquelas,
atando a golpe de Constitución,
a quienes con su voz tienen las calles llenas.
La prensa haciendo chitón,
engaña al pueblo sirviendo así a esta ralea,
camino directo a la perdición,
mientras el pueblo dividido de nada se entera.
Con sus legalidades al Borbón
dan esa utilidad de la que hoy escasea,
anunciando con hartera voz,
esta España se divide porque la secuestran.

Rafa Marín

Palabras

Palabras tan llenas de amor,
como olas hoy vienen y van;
como los sueños han renacido,
mil olores, mil momentos serán.
Hoy veo la luz, límpidos brillos,
de este otoño que al fin despega.
Catorce años como un suspiro,
y los muchos que mi alma espera. 

Paz y el regalo de tu felicidad,
que a tu lado no existen penas .

Rafa Marín

25 de octubre

Van cayéndose uno a uno estos años,
siempre tan bonitos como cortos,
pero hoy, hay cosas que pienso y añoro.
Llovía tanto y tú volabas sobre los charcos.
Alguien se acordó de mí y te saco la foto,
un ángel sonriente que se me fue acercando.
Yo, entre nervios y manos que me agarraron,
nunca antes fui tan afortunado y dichoso,
te ofrecías, toda amor, como flor temblando.
Recuerdas el vestido, nuestra risa y mis ojos?
Cuatro chuches y la gente que se quedó mirando.
El salón y la familia y todo aquel alboroto.
Lo recuerdo como si fuera ayer
y no como hace catorce años.
Por eso hoy de tu boca quiero saber...
Te volverías a casar como hicimos aquel año?

Rafa Marín.
Feliz aniversario

Una mañana

Derrama el día su luz,
fresca mañana; de un sol,
que de este otoño por fin,
entre azules hoy hace gala.
La brisa rola y con ella,
mil hojas en las aceras bailan. 

Hay olor a café y pan.
Ella, se afana con una sonrisa
y de su arte hace gala,
bandeja que vine y va
entre sus manos calladas.
La miro y sonrío otra vez,
¿me pones más café muchacha?
Ilumina un momento sus ojos
el reflejo puro de la ventana.
Yo quisiera saber, digo y callo, 

¿quién te hace feliz cada madrugada?
Me mira y su sonrisa se apaga.

Rafa Marín

Del reto del agua

Del reto del agua la llamaré. 

Dame tú, arroyo...estas horas,
fluido puro que apaga mi sed.
Corriente que en brillos se dora
con el sol del dulce atardecer.
Ascendiente vapor que llora
en el trópico que es tu nacer,
nubes que silenciosas decoran,
cielos negros que serán llover.
Cimas elevadas y duras rocas,
¿quien no las querrá recorrer?
Pues saltando cantan las gotas,
en su eterno ya descender.
Lento meandro que desemboca,
otra vez mar que te verá nacer.

Rafa Marín

Llega la noche

Llega la noche con su paz,
con su cansancio y dudas.
Se asoma a tu cama y mira,
con su pálida luz de luna,
con su silencio tan veraz,
y una soledad que no ayuda.
Llega la noche y todo brilla,
en un sin fin de estrellas puras.
Pero llega, oscura y sin callar,
preguntas que son ya absurdas.
Llega la noche, duerme chiquilla.

Rafa Marín

Anciano

Le veo ahí, sentado y solo,
en ese eterno y soleado banco.
Con sus manos apretadas,
como si buscaran un abrazo,
ese abrazo que ya nadie le da.
Lo miro con un doloroso silencio,
tirando de mis riendas y bocado
para no invitarle a galopar.
Me decido y doy ese fatal paso...
Hola anciano, dime, ¿cómo estás?
¿Se acordó tu cabeza del ayer?
Me mira, veo tristeza nada más,
cabecea como un viejo caballo,
y con un sacro si, se echa a llorar.

Rafa Marín

Destino

Cruel te presentas en la vejez...
¡OH! Después de tanto dolor vienes...
Tú, muerte, entregada al canto por una idea.
Tú, siempre mi vida esquivando,
¿acaso hoy pretendes que de un plumazo me absuelva?
¿Dónde está esa paz de los cielos,
que mi mente no comprende?
Dónde el reposo para estos huesos,
que de la vida ya nada quieren.
¡Ay! Que final, si fuera glorioso,
de su mano que está ausente,
ver la blanca orilla de luz y mar,
ver la vida tras el pulido cristal.

Rafa Marín

La noche no te quiere

La noche no te quiere en mis brazos,
te quiere lejana, inalcanzable luna del cielo.
Te quiere nube rompiéndose en chubascos,
pura niebla de plata en los caminos te veo.
La noche te quiere parpadeante luz de faro,
sonrisa en la tempestad para el marinero.
Te quiere aullido callado de la cima bajando.
La noche no te quiere a mi lado,
me quiere solo, entre versos,

que son una vida silenciando.

Rafa Marín

¿LIBERTAD?

¿Dónde estas hoy libertad,
arrodillada quizás,
bajo el peso de la injusticia?
¿Amordazada y apaleada;
secuestrada por manos impías?
¿Dónde están mis hermanos,
de esta España feroz y bravía?
Gritando vivas a la represión,
callados ante este atropello.
Hoy murió mi fe en la justicia,
entre las ancianas heridas,
bajo los cristales rotos

y humilladas las puertas.
Hoy la dignidad esta reprimida,
las voces silenciadas y mustias.
Brotarán de la rosa mil espinas,
espadas de vergüenza y valor
que protejerán esta ciudadanía.

Rafa Marín

Tus ojos

A esos ojos que me miran,
con esa timidez tan natural;
a ellos que ayer sonreían,
sin esconderse tras un cristal.
Poemas mi boca le dedicará,
letras que esconden ambrosía;
dulce alimento del paladar.
A tu risa que se desborda ya,
cuando se entretiene tu paso
con el ritmo de unas caderas
que ahora quisiera poder domar.

Rafa Marín

Sin salida

Recorre por mis venas ya cansadas,
este dolor que nunca es olvido;
galopante sinrazón, madrugadas,
placeres que no tienen su destino.
Tan amargo y dulce, tan dañino,
un demonio que destapa sus garras,
en mi corazón impone su ritmo
para en silencio cantar su bonazas.
Mente que callar ahora me manda,
aunque sienta abrazos de espinos,
lacerante castigo de mi alma.
Castigo que busco y no reprimo,
cuando su voz sin gritos me reclama,
una vez más saborear su trino.

Rafa Marín

El pantanal

Se alza la luna para iluminar;
noche sin sombras y astucia.
Riela...aguas grises y sucias,
un pantano, miedo y soledad.
Se agazapan en limo verde,
los escombros de mi verdad.
Sin ser la más pura y única,
será la que hoy voy a contar.
Ocultos sentimientos viejos,
postverdades, miradas vacías,
sudores de un poeta nada más.
Arraigada la vieja costumbre,
tan artera como pecaminosa,
este siempre dejarme llevar,
por los placeres que se asoman.

Rafa Marín

Silencios

Silencios, como las piedras
que bajo el agua esperan,
como ramas secas ardiendo,
como mi mirada y su olvido.
Almas entregadas a lo incierto,
suspiros que no saben a nada,
y mil palabras llenas de miedo.
Silencios que son madrugada,
callejones y sus deshechos.
Aventura de la cama callada,
cartones para bingo y juego.
Silencios de puertas cerradas,
atajos que llevan a los infiernos.

Rafa Marín

A la noche

A la noche hoy rindo culto,
cual lobo a la luna de plata.
En mi boca aullido profundo,
que entre lamentos escapa.
¿Dónde están flores y frutos,
dónde la verdad que cantan?
Ajados mis sueños oscuros,
reescrita historia sin tacha,
me contemplan hoy tan puros,
que hasta de soñar se cansan.
No quiero esperas sin futuro,
no quiero silencios y escarcha,
no quiero escalar esos muros,
donde mueren las esperanzas.
Quisiera..un mundo más justo,
donde las conciencias claman,
esas verdades como puños.

Rafa Marín

Pájaros azules

Tras el cristal de sus jaulas,
trinos y letras y soledades;
sin descanso ni madrugadas,
azules pájaros y puros vates.
Encomendados al quién será,
la hoguera de las vanidades,
vida y sueños dejando pasar;
siempre con medias verdades.
Hábiles dedos pidiendo besar
bocas que callan infidelidades,
asomados sueños al manantial
que llenan sus cálidas carnes.

Rafa Marín

Piel

Mis manos, de extremos ahitas,
se imaginan tu cuerpo lleno,
curvas de suave y cálida seda,
sedienta piel que pinceles añora.
Yo, tan malhumorado a días,
tan amo y señor de esta nada;
con mis manos de ti hoy vacías,
voy dibujando cielos multicolor.
La vida que en mí fue el ayer,
camino secreto y gran avenida.
también, a momentos, llega a ser,
brisa suave cuando nace tu risa.

Rafa Marín

Tiempo

La vida, horas, meses, sólo tiempo.
Noches que se llenaron de luz,
disipada oscuridad entre miedos.
Días entregados al más frío odio,
y que mi ser calentaron con su fuego.
Años que entre guerras pasaron,
caminos sin atajos a los infiernos.
Hoy, ahora, llega la ansiada paz
y con ella su delicado silencio.
Atardeceres, brillo de cristal,
para ver a aquellos a quienes quiero.
No temer levantar la mirada,
sentir que hoy por fin soy tiempo.

Rafa Marín

En este silencio

En este silencio que mi boca consuma,
incesante barullo de un mar;
almas ajenas perdidas en la bruma,
mil versos tristes y nada más.
Los dulces momentos en los que recordar,
las chiquillas felices que el alma curan,
entre sentimientos que no sé ordenar
cuando mis ojos del amor sólo ayunan.
Mirando palomas y soñando grullas,
gaviotas graznando sobre la mar,
sirenas que al amor tórridas conjuran.
Miradas escondidas en doliente espiar,
de escondidas manos entre la espesura,
amores solitarios que no saben gritar.

Rafa Marín

Se marchó

Se marchó, sombra en la noche
que tu boca no nombra,
escalón olvidado entre la hiedra.
Del ayer violento entre zozobras,
sólo quedaron, ya gastadas,
cuatro muescas sobre la piedra.
Al levantar las manos que
sobre la nada sus puños aprietan,
ve la luz que no es final
ni tan siquiera blanca orilla.
Una sonrisa feliz sus ojos ilumina
para decirle, no hay vuelta atrás.
El tiempo que gobierna las horas,
se torna elevado escabel,
rueca que entre hilos rueda.

Rafa Marín

La palabra

La palabra..sin doctrina,
sólo como vínculo indeleble
entre la pluma y el alma.
Como sueño que revive,
mil amaneceres en calma.
A veces callado suspiro,
a veces grito de madrugada;
caudal, repentina avenida
que con furia todo arrastra.
Olorosa, impresa y perseguida,
secreta al ser bella metáfora,
dura y veraz en la sabia pluma,
engañosa lección en las iglesias.
La palabra que es voz y jaula,
almas sinceras que la imaginan,
en versos de amor, luna de plata,
incendiario panfleto de esquina,
absurda fantasía en el cuento,
en política la peor de las mentiras.

Rafa Marín

De mil heridas

Por mil heridas vertida,
está sangre derramada,
fluye cual río sin vida.
Cosecha de muerte y almas,
que se ceba con la mentira.
A esos campos de labranza
vino la muerte y su guadaña,
segadora del trigo aún verde,
por el que las madres lloran.
No recuerdan sus impias iras,
ni el ondear de las banderolas;
el ayer, hoy de negro las pinta.
Historias que el ganador graba
en mármoles blancos sin sombra.
Canto inútil de voces que gritan,
las otrora mujeres asomadas,
al andén de lágrimas que brillan.

Rafa Marín

13 rosas

Eran y por siempre serán
amantes de la libertad.
Mujeres de manos curtidas,
de sueños altos...de verdad.
Alguna casi una chiquilla,
sin ser menos mujer que las demás.
Por republicanas pagaron su vida,
también por no dejarse acobardar.
Que valiente la horda fascista,
esta que hoy nos manda callar,
con sus leyes hechas a medida,
obligando al pueblo a olvidar.
Hoy es recuerdo de aquel día,
en el que cortando las rosas,
con la primavera quisieron acabar.

Rafa Marín

Escondida entre mis letras

Escondida entre mis letras,
vive este sueño tan grande,
que todo hombre desea.
Un atardecer entre las flores
de la mimosa que amarillea.
A su voz que reclama atenciones,
felicidad la mía le desea,
que siempre habrá coincidencias
para que entre rimas te vea.
Glauca mirada y sus sombras,
para imaginar lo que quiera,
pues aún siendo el día largo,
no quiero que tenga impaciencia.

Rafa Marín

Tímida boca

Tímida boca perdida en deseos,
reclamante callada de otra voz,
a la que considera un premio.
Retomadas las letras que son;
bienvenida y saludo y secreto...
agua viva que perdió la razón.
La distancia ahora se agranda,
una en post de sanar su corazón,
la otra que en su mirar aguarda.
Locura, eso que llaman "el amor",
latidos que resuenan en pechos
como sus voces hoy tan calladas.
Tímida boca de hada o de musa,
de lluvia que riega los eriales,
flor de cactus que ya renació.
Altanera chiquilla cansada
que en su silencio recolecta dolor.
Del ayer, nada ya nos queda,
solamente silencios y penas.

Rafa Marín

La nada

Nada que nunca quiere acabar,
atrapada en mi corazón espera.
Nuevas esperanzas, sin perdón,
de una vida que equivocó certera,
aquello que la musa le regaló,
palabras.
Se volvieron barro bajo sus pisadas.
¿Recuerdas cuerpo hermano,
los ojos vacíos y el temblor?
La boca sigue pastosa y cerrada,
no fue la cochina almeja muerta,
que todos los demás desearon.
Todo quiso ser la eterna nada,
callejuelas infectas y rencor.
¿Como, acaso hay una metáfora?
¡No! Todo es eso, la puta nada,
la desesperanza del perdedor,
el sueño de una meretriz arrugada.
Días sin gloria, sin tumba de mármol,
sin plañideras amantes secas,
sin sangre sus manos bañando.

Rafa Marín

Tiempo entre las manos

Sólo tiempo entre las manos,
como un ramillete de flores,
la vida las ha marchitado.
Palabras ocultas en la niebla
y su vergüenza del pasado.
En sus ojos una pasión brilla
y un dolor que va disimulando,
ya sin prisas al caminar, sueña,
las amistades que se olvidaron,
las amantes siempre risueñas,
hijas de la necesidad, chiquillas,
a la pasión todo le entregaron.

Rafa Marín

Ya se apaga la tarde

Por fin la noche ha llegado,
se llenan los cielos de estrellas
en la dulce oscuridad del verano.
Vuelvo al sur tan deseado
para rozar de mi hogar su frontera;
verdes montañas, torrentes y vados.
En las cimas, el pulido cristal,
nieves eternas de un invierno pasado.
Me miran los duros adoquines,
calles sin aceras, los muros blanqueados.
Ya se apaga la tarde, por fin...
la sacra noche ha llegado.
Cantos y su eco tan callado,
desfiladeros de piedra y verdad;
que preguntan si querré fajines,
si luciré los oropeles entorchados.

Rafa Marín

A Sitges en verano

Ya suenan las dulces voces
entre las paradas del mercado.
El bullicio apagado, caras conocidas;
un ansiado sueño de verano,
que se viste de flor de la rutina.
El balcón al cielo de una playa,
tan certera e intrínseca ...
tan amable, amistosa y bella.
Días de añorada paz infinita,
sueños de un viejo poeta.

Rafa Marín

Gallardetes

Gallardetes bien altos,
livianas gotas de sangre
y en los pies mil ramilletes
de flores blancas y púrpuras.
Veloces como alas del viento;
¡DUROS! ... como la historia,
cabalgantes sueños muertos,
embutidos en deslumbrante plata.
La obediencia hasta el desatino,
venganzas de sangre con riendas.

Rafa Marín

De una escena de la pelicula:
EL SEÑOR DE LOS ANILLOS, EL RETORNO DEL REY

Padre de su patria

Cuando llegue esa hora del dolor,
entre barricadas que arden,
si le toca esa suerte cual colofón,
de en las calles tener que perecer
por enfrentarse al opresor,
qué harás entonces, esconderte?
Pues, quien aspira a ser loado pater,
a de saber que es de gente de honor,
al paredón con orgullo enfrentarse,
sin vendas en los ojos que este apaguen.
Exigir en las sombras amagado,
sacrificios al pueblo que muere,
insatisfecha de libertad su hambre,
es más de mezquino y cobarde,
que de quien se proclama libertador.

Rafa Marín

Mares tormentosos

Mares tormentosos, de vida plena,

mañanas que son un sol encendido;

un pañuelo verde sobre la arena.

Mares, de oleaje siempre continuo,

caminos angostos llenos de piedras.

Mares de sombra y afilados espinos;

aguas tan claras como profundos

son los siempre negros abismos.

Mares, como sorbos de vida,

suspiros eternos de almas que esperan.

Mares, velas al viento en las escolleras,

sonrisas de ojos sombreros de paja

y entre los labios una sonrisa llena.

Mares...horizontes turbios y lejanos,

como un grito lanzado bajo la niebla.

Rafa Marín

Malas calles

Malas calles sin conciencia, 

fueron esas que le tocó morar;
todo fueron duras experiencias,
hasta el pan duro hubo de pelear.
Ellas fueron inicio del camino,
entre tropiezos, esquinas vacías,
soledades que ahora nos rodean;
que cruel el tiempo y su pasar.

Rafa Marín

Niños de la guerra

Nunca fue un ángel del cielo, 

aunque siempre moró allí. 

Atrapado en mil infiernos,
cosas de la vida y su vivir. 

Destronado a los dos años,
de sus hermanos fue paladín;
un castillo y su feroz ogro,
al que debió su frugal existir. 

Nació pequeño, duro y enjuto,
insaciables ganas de estar aquí, 

mas por tanta rabia contenida, 

se olvidó siendo joven de sonreir.
Se hizo a base de fronteras,
caminos solitarios y el devenir,
si su vida se midió en esperas, 

simpre supo a quien acudir.
Respondió a la cruel guerra,
único significado del existir,
con esa mirada tan inquieta,
manos torpes sin un fusil.

Rafa Marín

Diluirme...

Diluirme...
Como niebla que surge de estos 

mares profundos que ya no asustan.
Como el gris de la nube que descarga 

en la tarde toda su furia.
Diluirme...
Despertar en la madrugada 

estas inciertas ecuaciones y sus preguntas.
Despertar entre sudores y voces lejanas,

sueños febriles que aún tienen dudas.
Diluirme...
En los recovecos del tiempo, en la fronda,

en veredas y campo, noche absurda.
En las cimas heladas, en los parterres sembrados, 

en la mente tuya.
Diluirme...

Rafa Marín

Clandestinos

De tu vientre generosa madre
arrancan los vestigios del pasado.
Unas veces, cerámica y peltre,
otras máscaras de ese oro tan sagrado.
Tierra dieron a los viejos reyes;
aquellos que dicen que del cielo bajaron.
Lo hacen esos que no mienten, campesinos, gente buena, pobres desheredados.
Perseguidos, muertos los quieren,
esos otros, los de grandes dedos ensortijados.
Los que solo al dólar quieren,
los de barrigas y buches siempre hinchados.

Rafa Marín

Recuerdos

Caballero, simplemente eso fui;
de patanes el mundo está lleno.
Dices que una vez yo te protegí...
pero fue de mis infiernos. 

Aquella noche de amor morí.
Siento tristes tus ojos,
como triste sentí tu alma.
Eras tú tan niña y yo...
sólo uno que quiso que no lo olvidaras.
Han pasado tantos años;
mi condena no se acaba.
Triste tu voz, párvulos labios
que me besaban y yo tonto de mi,
de tu luz mi boca apartaba.
Que sabrá la muerte de morir.

Rafa Marín

Noche

Tú, que nunca has sido paz,
doblegando a tu discreción
mi canto sincero, mi verdad.
Llegas en estos momentos
en los que grita la necesidad
de tener al menos un sueño.
Me distraes esa capacidad,
poeta que no soy pero siento,
verso que todo lo quiere dar
entre mil palabras sin tiento.
Hoy, cansado de tanto luchar,
busco su mirada un momento,
y no consigo sus ojos dibujar.

Rafa Marín

Descontento

¿Dónde está su real realeza
cuando estos políticos del PP
las arcas y sangre saquean?
¿Dónde están sus señorías,
dónde pregunto, la vergüenza?
Escondidos tras mariscadas,
estos sindicalistas de pega,
almas vacías y vanas palabras
¿Dónde esta tu voz España?,
ese rumor que no me llega
¿Dónde están las manos alzadas
que en la calle piden condenas?
¿Dónde estás, mi puta España?
Quizás hoy estés acobardada.
Presa de leyes injustas,
con la boca hoy amordazada,
como los poetas ya muertos;
en Colliure bajo su lápida.
¿Dónde estamos los españoles,
dónde  nuestra furia y fama?

Rafa Marín

Niebla

Densa se levanta la niebla
tierra ya ahíta de sangre,
fruto de los hombres muertos.
Callados se ocultan los árboles
buscan humedad sedientos.
Densa, como densa es la noche
sin pálida luna que la alumbre.
Llena se levanta,gemidos y ayes.
La miro y me duele su nombre,
ciudad callada por el olor acre.
Hoy no hay sol que radiante luce,
solo esta niebla densa, densa, densa.

Rafa Marín

Arena

Arenas, todo sílice,
granos que son tiempo,
entre brillos van cayendo.
Arenas, castillos en ruina
por los despiadados estragos
del eterno rolar del viento.
Arenas, playa solitaria al sol
y su inefable, cruel fuego.
Arena, como ingentes pobladoras

de árido y despiadado desierto.
Arenas, simples, doradas y calladas,
manta para cuando haya muerto.

Rafa Marín

Vejez

Llego a la vejez
con más miedos que ayer.
Con el paso del tiempo perdí
hasta el sagrado sustento.
Todo es caída, sima que abrí
por mí futuro no prever.
¿Dónde estás ahora fortuna?

Que para mí nunca hubo nada.
Sólo esos tristes recuerdos
de la vida ya pasada.
¿Dónde están esos tesoros
que la aventura pregonaba?

Pirata fui que no quiso para sí
el dorado botín de la batalla.
Siendo joven sólo perseguí,
efimera gloria que me abrazaba.
Hoy todo eso ya lo perdí.
Hoy solitario y envejecido,
me asomo y miro desde aquí,
todas las oportunidades gastadas.
Mi fortuna, esa que fundí
para que la vejez no me alcanzara
se revuelve fiera contra mí.

Rafa Marín

Amanecer

Se viste de plata este mar
que es saludo y adiós,
entre los trozos abiertos
de túneles y brillos del sol.
No hay vuelo de gaviotas,
no picados de cormorán,
sólo la límpida plata,
aguas de espuma y sal.
El silbido ahogado que queda
impregnando los muros negros
siempre bañados de oscuridad.
No hay más que sueños perdidos
en otro mar que se llamó dolor.
La grandeza pequeña queda ente 

el gris y azul de las piedras,
ante ese cotidiano ver
que nunca el tiempo las medra.

Rafa Marín

Ricard

A este locuaz loco
que sonríe al despertar.
Al que se despereza calmoso, 

pidiendo desayunar.
Al que me llena de gozo 

prohibiendome fumar.
A su mente insaciable
y a su oído de escuchar...
los cuentos que le escribo
para invitarlo a soñar.
A la luz de sus ojos
que los mios va a cegar.
Al sabor dulce de su abrazo
y el te quiero papá,
aún cuando finjo ser severo
y lo tengo que castigar.
A su eterno pedir regalos
y simpre querer otro más.

Rafa Marín

Hijo mío

¿Qué podría decir luz de mis ojos?
¿Cómo expresará mi voz lo que es amor incondicional?
Diría...eres tú quien da vida a mi aplomo.
Estrella que bajo del cielo, cometa emocional,
felicidad cuando a velar tu sueño  me asomo.
Eres mi fuerza, amor y mi preciada paz.
Consuelo para mi dolor cuando miro tus ojos
y cada noche cachorro que asustado está.

Rafa Marín

Gaditano

Soy de campo, tierra herida,

por la ambición del arado.

Soy de la ribera y el carrizal,

que puebla los meandros,

cauce sereno, siempre puro,

por la zarampaña atravesado.

Soy el duende de la noche,

escondido en el cante de los gitanos.

Soy de la bahía y sus esteros,

del blanco armiño cristalizado.

También fruto de la albariza,

viña que pare su néctar dorado.

Soy del bullanguero carnaval,

en callejones empedrados.

Marinero en tierra de secano,

presa irredenta que el frances

que ni sus cien mil han conquistado.

Soy del Puerto y de Jerez,

soy por nacimiento gaditano.

Rafa Marín

Olivo

Eterno y nudoso verde,
tú, que donas tu fruto
tras aquel cruel castigo.
Solitario, siempre presente,

melancólico y viejo amigo.
Ayer de ti que fuiste árbol,
y ahora estás allí...caído.
De ti tan orgulloso, el hacha
hizo leña hoy, para en invierno
ser puro carbón encendido.
Tú, tan pasado en mi mente,
nunca serás descarnado olvido.

Vivirás ese estar por siempre,
sueño que jamás ningún gigante
en toda su vida nunca ha sentido.

Rafa Marín

Adiós

Adiós terrazas y café, adiós.
Hoy os contemplo,
entre las brumas de un soleado día
que se volvió ayer.
Adiós silencioso parque,
adiós cielos amarillos...
¿cuándo os volveré a ver?
Adiós bancos partidos,
sin mendigos que querer.
Adiós prisas y anhelos
que no vais a volver.
¿Qué puedo hacer ya?
Búscame un trozo de tierra
en una linde junto al mar,
con nubes en el horizonte
que poder mirar.
Ya se acabó mi tiempo de huídas, 

es hora de presentarme a Él,
de cerrar estas duras heridas
y pagar por el daño que creé. 

Adiós, con esta sonrisa partida
y mi ojos que se niegan a ver.
La persona seguirá aun viva, 

pero el poeta...a él le mataré.

Rafa Marín

Cuatro palabras

Cuatro palabras para un verso,
porque cuatro fueron nada más;
escondidas entre duros silencios
de los que nunca más escaparán.

Hojas caídas que arrastra el viento,
charcos de lluvia con brillo de cristal.
Estériles como acequias en el desierto
esperando una lluvia que no vendrá.

Tú, que eres voz, del aire lamento,
nube que entre luces trae ese trueno
que mi alma como brizna hace temblar.

Yo, avestruz en su fatal agujero,
quiero ser eterna noche sin final,
perdida voz, eco en los desfiladeros.

Rafa Marín

Locura

Asomado a este cristal
con mis sueños decorado,
voy dejando atrás
mis cuadernos olvidados. 

Escribanías sin final,
de todo mi tiempo pasado. 

Aventuras de lo letal
que mil cicatrices dejaron.
Ayeres para recordar,
mis ojos los encumbraron,
retazos son de realidad.
Esperanzas si me llegaron,
para en una cuneta acabar,
hasta que me encontraron.

Rafa Marín

Luna

Luna que llamas con tu luz,
al lobo de los perdidos te quiero.
Tú que buscas en el mar,
las alas blancas y los atardeceres de fuego.
Luna, que fuiste en sus ojos,
el reflejo que los míos no vieron.
Luna. ¿no oyes lo que estoy pidiendo?
Luna, rielando en el fondo
de este oasis de los arrieros,
a veces tan amiga y otras,
de mil enemigos lucero.
Ayer promesa y también muro
de mi lamentos.
Enquistada necesidad,
como la de los marinos sin puerto.
Luna, tú que me hiciste brisa en los bolsillos
y arena y piedra de caminos polvorientos.
Luna, a ti que vives el cielo,
a ti hoy te regalo estos pensamientos.

Rafa Marín

Muere el poeta

En la curva nueva,
se levantan los brillos
del camión con su carga de penas.
El pelotón fuma cigarrillos...
tensa es la espera.
Muere un poeta;
con la mirada en el horizonte,
con ese sabor amargo
de no poder terminar las letras.
Y fuma el piquete,
que matar inocentes
no es la mejor faena.
Que tristes están los ojos
del que inquieto pasea,
mientras espera que llegue la orden
y que pase lo que sea.

Rafa Marín

Tú

Se quiebra el cristal puro
de tu voz que sueña conmigo.
Cascada sollozante de un dolor,

que entender no consigo.
Aire entre mis alas tengo;

agujeros y mucho olvido.

Paz...cuando cuento esto,

es un guerrear continuo.
Tu manos que me dan
y mis labios que están perdidos.
Sólo pueden versar
y lo que quieren es ser

susurro en tu oído.
Porque no me tienes siempre,
porque somos poca nuez

y mucho ruido.
Gritos que al cielo  van a llegar,
delatando este sentir

que acabará conmigo.

Rafa Marín

Tierra

Tierra...tan lejana y cierta;
Oscuros recuerdos ya...
distancia insalvable, grieta.
Humo en la noche...soledad.
Manos temblando inquietas
porque no saben parar;
mil sueños entre las cejas
que nunca se cumplirán.

Rafa Marín

Sangría

Sangre de jóvenes potros
asomada al eterno maizal
donde las urracas graznan
melodías de amarillo azafrán.
Puras barbas de la mazorca
entre hojas de un verde mar.
Sus caminos de tierra plana,
polvareda de solitario caminar,
escondiendo los otros instintos,
aquellos cansados ya de luchar.
Muere la seca tierra exprimida;
no la dejan cultivar el santo pan,
vendida está la frugal cosecha
al servicio de quien la contaminará.

Rafa Marín

Barro y hueso

Barro y hueso como semillas del mal;
infinita sed de ese conocimiento
al que no dimos ninguna utilidad.
Asomadas almas con manos de ciego
cansadas ya de tanto querer palpar.
Entregados al pan sudado hoy,
para acallar los malditos que dirán.
Descreídas bendiciones muertas
junto al blanco sueño de un altar.
Amotinadas bocas mendigas de justicia,
arruinados cuerpos que matará la edad.

Rafa Marín

Horas

Horas de la mañana,
populosas y calladas.
De gente trabajadora,
de sueño sin almohada.
Horas de tren corriendo,
y andenes sin prisas.
Horas hoy noctambulas,
atrapadas por la niebla
de un tiempo que se acaba.
Horas soñando encuentros,
otras solitarias añoranzas,
deberes de un cruel puesto
que no entiende de amada.
Horas tan lentas y vacías,
tan duras y arruinadas,
tan amargas e impías.
Horas que se hacen insensatas.

Rafa Marín

La noche

La noche me vuelve
ese perro tan viejo
que ladra en tu calle.
Me vuelve cono de luz
que bajo la fría niebla
las farolas hoy paren.
La noche...mi agonía
entre pasos cansados;
sin nadie que me hable,
dolor entre recuerdos
sin poder hoy abrazarte.
La noche que son dos
y tú sin estar ahora aquí,
soledad por todas partes.
La noche, ver todo pasar,
como vela en un temporal
sin nadie que la aguante.

Rafa Marín

Sueños

Sueños que se fueron entre sueños,
agua pura que entre raíces y piedras
se fue llevando mi vida.
Sombras recortadas bajo el cielo negro,
noche sin luna en callejones oscuros
que no conocen la brisa.
Miedos siempre asomados
al abismo de lo cierto,
bajo la luz de este sol
que impenitente cada día brilla.
Sin esperanzas se quedaron mis ojos,
paisaje helado entre esta niebla gris
que todo lo difumina.

Rafa Marín

Las otras madres

A ellas, que madres también son,
tan humanas y tan buenas y tan...
hermosas para esos ojos del amor.
Ellas, entre silencios y un dolor,
ellas que son reinas en la calle...
castillos soñaban en nubes de algodón.
Se ganan la vida batiendo cuero,
malos novios de pago y olor a sudor;
que les hablan de esa vida ...
con la que soñaron y no se cumplió.

Rafa Marín

Día de la madre

Yo no quiero escribirle a la madre...
sino a la esposa y amante.
A la de tibia caricia
y sonrisa desbordante.
A la que la paz me quita
y cuando se enfada
me hace la vida insoportable.
A la que sueña mil caricias
y de mis manos
es alma mendicante.
No quiero escribir
a la madre de otro,
quiero tus ojos
pa' poder mirarme,
pa' sentir esa urgencia viril
de abrirme paso entre tus carnes.
Quiero...como no quererte,
si aún siendo como soy,
quieres que siga de tu vida siendo parte.

Rafa Marín

1° Domingo de mayo

Pasan los días entre desencuentos,
aferrándome a la razón de amarte.
Te quiero y no quiero saber el por qué te quiero.
Sólo sé, que pienso en aquella noche cada instante...
Aferradas tus manos a las mías y mi miedo,
Mientra Ricard era esa nueva vida pujante.
Discusiones que vienen y van...como el viento;
del que nunca sabes hacia dónde soplará.
Pero es domingo de mayo y tú consciente,
las horas con nosotros otra vez compartirás.
Sueño que fue deseo de este alma loca,
de esta sinrazón que sólo te sabe amar.
A veces gruñón sargento entre razones,
a veces niño inquieto que olvida la felicidad.
Pero siempre hombre cariñoso que tiene...
ese preciado tesoro de saber de ti y tu soñar.

Feliz día de la madre
Con ese amor que me despierta tu presencia
Rafa Marín

Tu día

Siempre urgente sonrisa
y siempre puta de mis deseos. 

Siempre madre que acuña
esperanza entre desvelos.
Sin flores que poder cortar
para hacer ramo en tu pelo,
sin voz para poder recitar
esto que por ti estoy sintiendo.
Madre como ninguna eres,
entre paciente amistad y celos,
llorando las soledades duras
cuando plantada y sola te dejo.
Viva como flores de campo vivo,
viva como sueño que soñar quiero.
Tan amante y tan amiga,
tan jodida y tan sincera,
que en mi alma hoy se queman
los más hermosos recuerdos.
De tu día que es mañana y hoy,
de todos los que te estoy sintiendo;
siente el orgullo de ser MADRE,
que no te lo quite ningún ogro.
Amarte no es mi gran osadía,
sino el resplandor de tus risa.
Que para mi el cielo es mirar
esas flores amarillas
reflejadas en tus ojos.

Rafa Marín

Por el gusto de poder escribirte...

A mi madre

Me atrapa el dolor de tu recuerdo...
¿por qué te tuviste que marchar?
No es la muerte si a pensar me siento...
es que sé que nunca de su abrazo te soltará.
Han pasado noches y días cruel invierno
y tus ojos glaucos siento que no cesan de mirar.
Tan perdido niño fui como duro me hizo el tiempo.
Tu día, siempre un hoy para mi será,
que el primer domingo de mayo lo siento
como el día de otra madre, la de Ricard.
Ya me voy despidiendo, sin flores ni miedos.

Rafa Marín

Crueldad

Crueldad...
Imaginario momento
que no quiero ni imaginar.
Tú, cavando tu propia tumba 

mientras ellos miran callados. 

Cigarrillo humeante en temblorosa mano
y ese ya no mirar hacia adelante,
se acabaron tus días hermano.
Do quiera que mires
todo se vuelve lejano...
como sueños del pasado
y una plegaria nace
en tus labios secos y sellados. 

Me imagino la niebla fría
y el sudor tu frente perlando,
esa triste letanía que serán 

los cuatro disparos.
Imagino el silencio honroso de los campos
y como lo rompen las avecillas inocentes cantando.
Imagino cualquier sitio lejos de este momento...
Imagino que la sangre no mancha mi manos.

Rafa Marín

Atrás

Atrás quedan las verdes colinas,
ocultas tras las densas nieblas.
Atrás quedan mis amadas veredas,
atrás el viento soplando en las cimas.
Atrás los interminables días,
sin lugar para la paz y la fiesta.
Atrás quedará esta cruel guerra
que hizo mi alma escurridiza anguila.
Atrás el agua de la torrentera fría
arrastrando en su corriente de seda;
las piedras pequeñas las hojas caídas.

Rafa Marín

Flores

En aquellas ramas altas
que la luz del sol filtran
es donde crecen

para mis ojos

las más bellas flores amarillas.
Corazones bajo el sol
que las marchita,
vida que las abejas

con su vuelo
hacen entre caricias.
Sueño entre las manos
de amadas y chiquillas
y pasión que aprietan
en sus puños cerrados
los mineros de la vida.
Flores, a veces marco vivo
de interminables carreteras,

otras broche rojo
que el trigo maduro colorea.

Ayer corona y llanto
y hoy blanco ramo
que decora iglesias.
Pasión de jardineros
que las adoran de rodillas
y otras negocio en manos
de pícaras gitanillas.

Rafa Marín

Borradores de blanco arrugado,

Borradores de blanco arrugado,

hojas de papel de otoño

que mi poca fe marchitaron.

Cuadriculados copos de nieve

como campo de algodón arrasado.

Se presenta ante mis ojos;

tormenta de nada e hiel,

hermoso campo por mi minado.

Posibles que nada van a ser,

ora cuaderno ora twits breves...

borrador,  tiempo que van pasando...

Rafa Marín

Encerradas

Encerradas, como sueños presos,

esos brillos de estrellas lejanas

cuando las miro las siento.

Tan rodeadas de esa gran nada

que es el frío y negro firmamento.

Olvidé sus añorados nombres;

como en mi vida los recuerdos;

infantil que se asomaba

a lo que se volvió un infierno.

Estrellas quizá ya apagadas,

consumidas por el cruel tiempo.

Ayer compañeras entre ramas,

hoy esperanzas que huyeron.

Rafa Marín

Ojos

Ojos que quisiera hoy míos;

tan profundos los siento,

como asomarme al abismo,

siempre de silencios eternos.

Ojos que sin ver miro

en mis perdidos recuerdos.

Ojos inocentes; tan bellos,

de pasión viva y deseo.

Ojos de incesante grito

en los callados encuentros;

un mar de ron tranquilo

que con ansias me bebo.

Rafa Marín

Limpias alas de mariposa

Limpias alas de mariposa,

de la luz tan enamoradas,

como una perfecta verdad,

buscando estrellas de agua.

Reflejos que son luna llena

ondulando tras las pisadas

de una bota con suela negra

y de clavos cruel tachonada.

Perdidas horas de ese sueño,

que solamente es madrugada;

como alados ángeles siniestros,

tañendo mil campanas ajadas

en un pueblo que está desierto

y que nunca habitaron almas.

Esquivando aquellos momentos

y al sabor que la vida te daban,

ya, sin canciones ni requiebros

de esa boca por siempre amada;

tan sólo afilados dientes negros,

que tu piel ávidos desgarran.

Rafa Marín

Llegó la noche como huracán

Llegó la noche como huracán,

horas que descargan reproches,

sueño que en silencio se va.

Desnudas paredes llenas de frío

y una cama llamada soledad.

Sueña madrugada,

que ya se durmieron mis sueños,

barquito velero sin mar.

Noche sólo una y otras mil,

que al viento quieren suplicar.

Madrugada, hoy pienso

entre perdidas mis miradas,

en aquellos ojos que a verme

con su sonrisa ayer vinieron.

Mi cara, mueca tan cansada,

a veces ... viejo recuerdo,

cuando de llorar paraba,

robaba, osado, las llaves,

aquel armario siniestro,

donde la muerte aguardaba

con el seguro bien puesto.

A veces se me mueren,

el alma y los sentimientos.

como lo hacían ayer ...

hace ya tanto tiempo ...

cuando escondido aguardaba

a que le venciera el sueño.

Rafa Marín

Quien te quiera perfecta

Quien te quiera perfecta

que talle tu copia en piedra.

Sangre que llena un corazón

y los sentimientos que encierra.

Poderosa fue tu razón

y que se joda quien no entienda.

A tu vida le pides sólo amor

y justo es que eso obtengas,

mas ¡ay! como sufre la razón

cuando nunca lo encuentras.

De mi vida que fue perdición,

y de la verdad que no es nuestra,

no poder versos publicar amor,

siempre escondidos en la prudencia.

Rafa Marín

La serena belleza del gorrión

La serena belleza del gorrión,

que no sueña ser ave del paraíso

ni tampoco canto de sirena.

La verdad que no se cuenta

y que cada día te hace canción.

Sueño que ayer soñabas

y que ese sueño quiero ser yo.

Entrelazadas manos siempre llenas,

verdadero significado de la ilusión.

A veces paz y otras  tanta guerra,

quien quiera lo simple pida perdón.

las esperanzas desde siempre puestas,

como las del minero en su filón.

La vida que me fue tan puñetera,

contigo no me dejó ninguna opción.

Rafa Marín

La noche cayó envuelta

La noche cayó envuelta

en su silencio mortal.

Se destapó, brillo de estrellas

y una luna que se apaga,

palabras, desamor, conciencias

y una visita enamorada.

Manos como suspiros que hablan,

como verdades, momento triunfal.

Recorridos de una memoria

que asustada falla y un latido

que entre las venas se escapó.

La noche como lo son todas,

como ninguna quiere ser,

va llenando de ayer un patio

que de tanto llover hoy se mojó

Rafa Marín

Déjame

Déjame en esta soledad

que me abraza, madrugada.

Déjame con estos miedos,

que son duros y antiguos.

Nada necesito para comenzar

de nuevo a caminar,

quizás sólo el sol en mi espalda

y el solitario camino.

Déjame que del árbol

pueda su sombra aprovechar,

que refresque los doloridos pies

con el agua del río.

Déjame levantarme una vez más

y volver a luchar.

La guerra me atrapó

y no quiero defraudar al destino.

Déjame, quiero romper mi mirada,

no dejar de llorar,

gritar todo lo que fui,

olvidar que una vez fui niño.

Rafa Marín