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jueves, 24 de enero de 2019

La victima (relato corto)



El fotógrafo señaló al cadáver con indiferencia.

- ¿Se sabe quién es, sargento?

- Sólo es una mujer Pete, solo eso.

Los dos hombres miraron un momento el cuerpo que flotaba junto a la orilla, a lo lejos sonaba una sirena.

- ¿Sabes, Pete? dijo el sargento.

- A veces creo que fui yo.

El fotógrafo miró al sargento, por la mejilla del policía se deslizaba una lágrima.

- ¿Fue usted quien la mató, sargento?

- No, no lo hice yo, Pete. Fue otro, yo sólo no hice bien mi trabajo.



Cinco años antes ...



La carretera discurría sinuosa a todo lo largo del acantilado, a la derecha, un paisaje de azules que parecían infinitos se mostraba inalcanzable.

La mujer conducía un buick descapotable color ceniza, una mancha que se deslizaba demasiado veloz sobre la oscuridad del asfalto. El nuevo derrapaje hizo que al fin levantase el pie del acelerador y por un instante su mirada pareció recuperar algo de cordura.



Otro verano ...



El acantilado hoy de dibujaba a su izquierda, el camino de ida, por azar o por destino, siempre acababa a la vuelta. Vio la entrada a la mansión y desaceleró. El vigilante a la vez que abría la enorme reja metálica, saludó solicito. Ella se detuvo a su lado, le saludo por su nombre y preguntó si su marido había regresado.

El empleado, con cara seria, le dijo que la policía esperaba desde hacía al menos un par de horas.

Con un simple ...

- Bien, gracias. Dirigió el buick hasta la entrada principal.

Sentados en la escalinata esperaban dos agentes de paisano. Un temblor recorrió el cuerpo de la mujer.



Otoños e inviernos ...

Los largos meses de otoño e invierno, el matrimonio Palme, solía pasarlos en España. En la ciudad de Sitges tenían la intimidad justa para llevar una vida anónima y relajada.

La mañana, aunque fresca y ventosa, lucía esplendorosa. Ella caminaba junto a la orilla del mar, los zapatos en su mano derecha no se balanceaban con el ritmo de un tranquilo paseo. En el teléfono de su mano izquierda, una voz un tanto oscura la prevenía sobre posibles futuros acontecimientos.

Ella intentó mantener la calma, pero el ladrido de un perro que jugaba hizo que el teléfono resbalase de sus dedos y cayese sobre la arena, al recuperarlo, su interlocutor había colgado.



El último verano ...



Al salir de la mansión vio como el vigilante de seguridad levantaba la mano, ese día no se detuvo a saludar. Conforme se alejaba por la carretera de la costa, siempre con el infinito a su derecha, empezó a sentir dudas. ¿Era un saludo, o tal vez quiso advertirla de algo?

Instintivamente aceleró al buick, cuando se sentía atrapada, correr era su primer movimiento.

En la siguiente curva se cruzó con el coche camuflado de la policía, éste, llevaba la sirena sonando y una luz azul destellaba sobre el conductor.

Vio como los agentes la señalaban, como aminoraban la marcha y como ...

Toda visión desapareció.

Con la distracción, el vehículo se había precipitado contra el protector, lo había sobrepasado y se precipitaba por el acantilado sin remisión.



madrugada ...



Despertó sobre saltada, todo estaba oscuro y no pudo moverse. gritó, nada; el sonido quedó amortiguado de manera claustrofóbica. No se rindió y grito otra vez y otra y otra ...

De repente una luz inundó la habitación y varias personas vestida de blanco se acercaron a ella.

Sintió miedo de sus ojos y de sus intenciones.

Notó como la aguja atravesaba su piel y su carne. Poco a poco todo se volvió oscuro y cálido.

Al poco, en la sala de guardia del hospital mental ...

- ¿Quién es  la mujer? Peguntaba una joven y guapa enfermera.

- Lo desconocemos. Dijo en psiquiatra. La trajeron hace ya cinco años. vagabundeaba semi desnuda por una playa de Sitges.



En algún lugar de la costa Azul ...



El vehículo se estrelló contra las rocas, su conductora murió en el acto.

Los agentes de policía se sintieron culpables, iban a informarla que habían logrado dar con el paradero de su marido, y que éste se encontraba bien.



Junto al mar ...



- Pete ... comenzó el policía, ayer esta mujer pidió ayuda. Al parecer unos alienígenas pretendían asesinarla.



Fin



Rafa Marín





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