Como flor de Opuntia,
tan hermosa y salvaje,
delicada a mis ojos
y de mis manos sueño inalcanzable.
Amanecer anaranjado
que imagino brisa suave
y de mis manos sueño inalcanzable.
Amanecer anaranjado
que imagino brisa suave
y coronada de mil espinas
que mi piel con su roce rae.
Rojo tu fruto carnoso,
dulce cual almíbar nace,
delicada humanidad
que la más hermosa
de las mujeres te hace.
Flor de cactus, desértica,
solitaria y tan amable.
Rojo tu fruto carnoso,
dulce cual almíbar nace,
delicada humanidad
que la más hermosa
de las mujeres te hace.
Flor de cactus, desértica,
solitaria y tan amable.
Rafa Marín
No hay comentarios:
Publicar un comentario