Me mira, segura y dulce, sólo musita,
un inconmensurable ven.
No soy más que una rama que tiembla,
justo antes de arder.
Todo es silencio,
amor que con palabras,
describir no sé.
Se detiene un instante,
el tiempo cruel.
Me mira, sonriente y dichosa,
como la flor cubierta de rocío.
Rafa Marín
No hay comentarios:
Publicar un comentario