Casi sin querer, he visto la pequeña playa.
Tan desierta y vacía, que las olas al llegar,
parecían palomas de alas blancas.
Me trajo recuerdos de un ayer,
que en mi memoria se perdían,
como el tiempo en la madrugada.
Que altivos algunos sueños,
en los días llenos de pobre calma.
Rafa Marín
No hay comentarios:
Publicar un comentario