La tecnología trajo un encuentro fruto del azar. Tras un período relativamente corto de chateo incesante, solo un hueco tras su nombre. Nada hoy no se inspira la comunicación. Permanezco día tras día pegado al ordenador en un vano intento de conversación. La social red me deshumaniza, ya no salgo, no siento en mi cara la brisa fresca del atardecer, mis ojos enrojecidos y de pupilas dilatadas miran el fondo de la incomprensible magia del monitor. Hoy desahuciado miro al fin la luz del sol, y entonces llega un mensaje; anónimo. –El usuario XXX ha sido cancelado-. Qué pasó, nunca lo sabré, solo era un nombre.
Vistas de página en total
lunes, 21 de mayo de 2012
martes, 1 de mayo de 2012
Día de playa
Con la marea llegó, fue una algarabía.
La playa se llenó de gentes curiosas.
Acudieron vendedores de refrescos y golosinas.
Por un momento el pueblo recobró el pulso perdido.
Esa mañana llegó, la marea arrastró un cadáver.
Rafa Marín
miércoles, 25 de abril de 2012
A mi tierra
Empiezo a concebir la idea de olvidarte.
Sueño cruel y repetitivo, pesadilla.
Solo de imaginarlo enfermo, desconsuelo,
Sobremesa del desahuciado, tristeza.
Calles frías batidas por el viento,
Suciedad que se amontona.
Claro día de estío, extraños
Deambulando por tus venas.
Parques nunca acabados, plazas vacías,
Abandono y tristeza.
Un pasado que me conmueve y aleja.
Otra vida... tan lejana y dolorosa
Que pese a todo no logro olvidar.
martes, 24 de abril de 2012
Otra noche
Otra noche, otro regreso,
siempre el mismo destino.
Van cambiando ausentes
los pasajeros, callados.
Miro, siempre busco un compañero
de este conocido viaje.
¡que pocas veces acierto!,
solo cuando erato me responde
es cuando alguno encuentro
y me hace olvidar lo que llevo dentro.
Rafa Marin
siempre el mismo destino.
Van cambiando ausentes
los pasajeros, callados.
Miro, siempre busco un compañero
de este conocido viaje.
¡que pocas veces acierto!,
solo cuando erato me responde
es cuando alguno encuentro
y me hace olvidar lo que llevo dentro.
Rafa Marin
martes, 17 de abril de 2012
Pacífico
Miro el pequeño puerto y los mástiles
que se balancean mudos en la tarde.
Las montañas se visten de nubes,
sombreros de agua que da vida.
Las corrientes marinas dibujan
sobre el agua líneas de brillo
y de cuando en cuando una ola
da vida a la quietud abrumadora
de la azul inmensidad.
Rafa Marín
que se balancean mudos en la tarde.
Las montañas se visten de nubes,
sombreros de agua que da vida.
Las corrientes marinas dibujan
sobre el agua líneas de brillo
y de cuando en cuando una ola
da vida a la quietud abrumadora
de la azul inmensidad.
Rafa Marín
sábado, 7 de abril de 2012
Arriates
Trozos de tierra aislada,
islas de azotea y balcón.
Camino con la mirada alta,
busco el color de una flor,
una chispa de vida aferrada
a la bondad de una pared
y una presencia que la cuide.
Rafa Marin
islas de azotea y balcón.
Camino con la mirada alta,
busco el color de una flor,
una chispa de vida aferrada
a la bondad de una pared
y una presencia que la cuide.
Rafa Marin
Descanso largo
Tras la larga y serena pausa,
retomo sin afecto la rutina,
de ese tiempo medido en números
que viajan por una pantalla,
que hoy adivino amiga,
por la que sin querer ver,
veo pasar el tiempo,
llevándose samaritana
las horas al destierro.
Rafa Marin
retomo sin afecto la rutina,
de ese tiempo medido en números
que viajan por una pantalla,
que hoy adivino amiga,
por la que sin querer ver,
veo pasar el tiempo,
llevándose samaritana
las horas al destierro.
Rafa Marin
El tren
Pasa un pueblo
dormido en la distancia,
llega otro igual,
ausente a lo lejos.
Se detiene
un instante el trasiego,
se abren
como flores las puertas
pariendo nocturnos viajeros.
La voz dulce
enlatada anuncia
parsimoniosa
la gran palabra.
Miro interesado y parece
que hoy solo yo me bajo,
Dando tumbos voy llegando
al refugio de mi alma,
una parada, un instante
y se desboca mi corazón,
que tras el interminable viaje
mi destino es encontrarte
casi dormida y anhelante.
Rafa Marín
dormido en la distancia,
llega otro igual,
ausente a lo lejos.
Se detiene
un instante el trasiego,
se abren
como flores las puertas
pariendo nocturnos viajeros.
La voz dulce
enlatada anuncia
parsimoniosa
la gran palabra.
Miro interesado y parece
que hoy solo yo me bajo,
Dando tumbos voy llegando
al refugio de mi alma,
una parada, un instante
y se desboca mi corazón,
que tras el interminable viaje
mi destino es encontrarte
casi dormida y anhelante.
Rafa Marín
Montserrat (macizo)
La magia llena el entorno.
Las eras se dibujan en su petrea piel
y descubren sus grietas vida y recuerdos.
Dibuja en ti la noche gigantes
recortados por un fondo de estrellas.
Rafa Marin
Las eras se dibujan en su petrea piel
y descubren sus grietas vida y recuerdos.
Dibuja en ti la noche gigantes
recortados por un fondo de estrellas.
Rafa Marin
España
Hoy son los pasajeros como aves sin alas,
se muestran callados y perdidas sus miradas
en misterios lejanos tras las ventanillas del tren.
Luminosa la mañana avanza hacia el ocaso frio,
como lo son todos en este invierno sin fin.
Mi mente en cambio se asoma al otro interes,
el de mi hijo que tras la noche febril recupera
en su abuelo el ansia de vivir envuelto en mimos.
Hoy no arde el cañaveral, día sin fuego,
niños sin cena, maldito sueño sin final.
Rafa Marin
se muestran callados y perdidas sus miradas
en misterios lejanos tras las ventanillas del tren.
Luminosa la mañana avanza hacia el ocaso frio,
como lo son todos en este invierno sin fin.
Mi mente en cambio se asoma al otro interes,
el de mi hijo que tras la noche febril recupera
en su abuelo el ansia de vivir envuelto en mimos.
Hoy no arde el cañaveral, día sin fuego,
niños sin cena, maldito sueño sin final.
Rafa Marin
viernes, 6 de abril de 2012
Sentado en la acera
Acurrucado en la acera,
sentado frente al pequeño vaso vacio.
Aterido de frio y con el alma hambrienta,
miras como pasan ausentes los afortunados.
La esperanza desertó hace ya mucho
y los pocos girones que quedan
se escapan por tu mirada vacia.
Ahogas en vino barato cualquier indicio de protesta
y te reunes con los tuyos,
los desheredados,
en un vano intento por ser uno mas
y no ser señalado.
Rafa Marin
sentado frente al pequeño vaso vacio.
Aterido de frio y con el alma hambrienta,
miras como pasan ausentes los afortunados.
La esperanza desertó hace ya mucho
y los pocos girones que quedan
se escapan por tu mirada vacia.
Ahogas en vino barato cualquier indicio de protesta
y te reunes con los tuyos,
los desheredados,
en un vano intento por ser uno mas
y no ser señalado.
Rafa Marin
Viejos
Hay personas que me inspiran dolor,
son como viejos peluches abandonados,
sucios y rotos, a los que les falta un ojo.
Son como esas casas antiguas
abandonadas a su suerte; solitarias,
sin mas visitas que las horas muertas.
El tiempo hizo mella en ellas,
no perdonan ni los años ni el olvido.
Otras sin embargo
no me inspiran mas que rabia.
Señoras haitas de ego y opulencia.
Ricos y sombríos jovenzuelos
con aires de señor y mirada de ogro,
envilecidos por el placer del dolor ajeno.
Groseros impacientes que descargan
su ira sobre indefensos inocentes.
Quizás espero mucho de esta humanidad
que comparto, no lo sé.
Hay personas que no me inspiran nada,
traidores a su causa, conejos asustados
que nunca apuestan y siempre adulan al poderoso. Todo un mundo de personalidades ocupadas
en vivir una vida que les fué regalada.
Rafa Marin
son como viejos peluches abandonados,
sucios y rotos, a los que les falta un ojo.
Son como esas casas antiguas
abandonadas a su suerte; solitarias,
sin mas visitas que las horas muertas.
El tiempo hizo mella en ellas,
no perdonan ni los años ni el olvido.
Otras sin embargo
no me inspiran mas que rabia.
Señoras haitas de ego y opulencia.
Ricos y sombríos jovenzuelos
con aires de señor y mirada de ogro,
envilecidos por el placer del dolor ajeno.
Groseros impacientes que descargan
su ira sobre indefensos inocentes.
Quizás espero mucho de esta humanidad
que comparto, no lo sé.
Hay personas que no me inspiran nada,
traidores a su causa, conejos asustados
que nunca apuestan y siempre adulan al poderoso. Todo un mundo de personalidades ocupadas
en vivir una vida que les fué regalada.
Rafa Marin
lunes, 19 de marzo de 2012
Tiempo
Corre el tiempo,
siempre en contra,
pues sabido que al nacer
la cuenta atrás nos atrapa
en un vortice que cada día
es mas rápido.
Con los años se estrecha la diana
a la que siempre apuntamos y disparamos.
Quizás un día, cuando la sombra aceche
tras la puerta miraremos hacia atrás,
para ver esos años que desperdiciamos
pensando que eramos inmortales.
Rafa Marin
siempre en contra,
pues sabido que al nacer
la cuenta atrás nos atrapa
en un vortice que cada día
es mas rápido.
Con los años se estrecha la diana
a la que siempre apuntamos y disparamos.
Quizás un día, cuando la sombra aceche
tras la puerta miraremos hacia atrás,
para ver esos años que desperdiciamos
pensando que eramos inmortales.
Rafa Marin
Recaida
Vuelve como un boomerang,
irremisiblemente tras el lanzamiento.
acertando al instante del descuido,
para romperte el alma certero.
Rafa Marín
irremisiblemente tras el lanzamiento.
acertando al instante del descuido,
para romperte el alma certero.
Rafa Marín
sábado, 17 de marzo de 2012
Civilización
Los huertos a la entrada de Barcelona,
el contraste de lo natural con esa cruel
realidad en la que habito.
Donde el canto de los pájaros se fué
y los caminos solo son asfalto
transitado por mounstruos de acero y plástico.
Rafa Marin
el contraste de lo natural con esa cruel
realidad en la que habito.
Donde el canto de los pájaros se fué
y los caminos solo son asfalto
transitado por mounstruos de acero y plástico.
Rafa Marin
Añoranza
Cada día la vida es mas cara,
cada noche los sueños son mas cortos.
Me gustaría volver a la infancia
despreocupada del campo.
Los juegos locos y revolcarme
por la hierva mojada.
Cazar gorriones y comer higos chumbos.
Añoro no tener toda la vida por delante.
Rafa Marin
cada noche los sueños son mas cortos.
Me gustaría volver a la infancia
despreocupada del campo.
Los juegos locos y revolcarme
por la hierva mojada.
Cazar gorriones y comer higos chumbos.
Añoro no tener toda la vida por delante.
Rafa Marin
Pasajera
Se pierden tus ojos negros,
mirando de reojo la noche infinita .
Viendo pasar luces raudas y lejanas.
Se incha tu pecho al ritmo de tu vida,
e imagino el latir de un corazón solitario.
De pronto cobran brillo tus dos pozos
el sonar del teléfono pinta una sonrisa
cómplice con el interlocutor que se me antoja viejo.
Rafa Marin
mirando de reojo la noche infinita .
Viendo pasar luces raudas y lejanas.
Se incha tu pecho al ritmo de tu vida,
e imagino el latir de un corazón solitario.
De pronto cobran brillo tus dos pozos
el sonar del teléfono pinta una sonrisa
cómplice con el interlocutor que se me antoja viejo.
Rafa Marin
Reflejo
Me asomo a la noche
desde el refugio de la ventana cerrada.
Veo como se mecen las hojas del árbol distante
y descubro en la negra calle olvidada
una sombra inquietante que conozco.
Rafa Marin
desde el refugio de la ventana cerrada.
Veo como se mecen las hojas del árbol distante
y descubro en la negra calle olvidada
una sombra inquietante que conozco.
Rafa Marin
martes, 6 de marzo de 2012
Madrugada
La rosada cae pura del cielo.
Y la blancura que cubre las briznas,
son las lágrimas del hielo.
La noche pasa serena y añoro la voz amiga.
Que pocas palabras para tanto desconsuelo;
y cuantas harán falta para comprenderlo.
Una canción suena en tus oídos,
callada y mística como un suspiro.
No consigue hacerte olvidar el olvido,
más resume en sus letras
todo el dolor que has sentido.
Y la noche sigue pasando,
casi luminosa bajo las estrellas.
Una puerta se abre, otra se cierra.
Ninguna es la tuya y estas muriendo.
Que hará ella te preguntas, en silencio.
Y buscas palabras bellas para su canto.
Más la pena negra todo lo anega,
acallando respuestas a tus preguntas.
Con el silencio en los labios,
con la sonrisa aflorando.
¡Que noche tan bella!;
Y que pronto se ha acabado.
No son siquiera las tres
y añoras el calor de sus besos.
El olor de su cuerpo se ha disipado
y el recuerdo la pinta a tu lado;
Mirando con ojos callados,
sonriendo al temblor de tus brazos.
La noche va pasando lenta y callada.
Que larga se hace hoy la madrugada.
Ven tibio sol de invierno.
Ven sin tu furia a calentar mi cuerpo.
Que la noche divina se llevó mi sosiego,
Se fueron sus abrazos,
Se fueron a la habitación de al lado.
Rafa Marín
Rafa Marín
Las cinco
Los clarines anuncian tu muerte.
Tu suerte esta echada hace tiempo.
Para ti se pide juego limpio.
Y cárdeno quedará el albero.
Tanto si vences como si pierdes.
Para ti no habrá duelo.
Rafa Marin
Rafa Marin
lunes, 5 de marzo de 2012
Regreso
No me gustan los domingos
que tengo que trabajar.
Pasan tan lentos que...
diría que el tiempo se detuvo.
La tarde deja paso al anochecer,
la luna culmina su pálido cenit.
El tren hoy para en todas,
ignorando mi prisa por volver.
Mi amada me espera, mi hijo duerme.
Tengo prisa por volver.
Rafa Marin
que tengo que trabajar.
Pasan tan lentos que...
diría que el tiempo se detuvo.
La tarde deja paso al anochecer,
la luna culmina su pálido cenit.
El tren hoy para en todas,
ignorando mi prisa por volver.
Mi amada me espera, mi hijo duerme.
Tengo prisa por volver.
Rafa Marin
Vagabundos
La tarde amenaza lluvia.
El callejón exhibe pequeños charcos
que refejan los destellos irisados
de las luces de emergencia.
La acera muestra los espacios vacios
entre los desahuciados, envueltos
en mantas y cartones.
Hileras apretadas de ingente miseria,
y un hueco limpio..., vacio.
Ella vivía allí, hasta ayer.
Su cuerpo descansa al fin
sobre la losa fría de una morgue.
Esperando que futuros aprendices
comprendan los misterios
de un cuerpo, que solo ahora
es considerado humano.
Rafa Marin
El callejón exhibe pequeños charcos
que refejan los destellos irisados
de las luces de emergencia.
La acera muestra los espacios vacios
entre los desahuciados, envueltos
en mantas y cartones.
Hileras apretadas de ingente miseria,
y un hueco limpio..., vacio.
Ella vivía allí, hasta ayer.
Su cuerpo descansa al fin
sobre la losa fría de una morgue.
Esperando que futuros aprendices
comprendan los misterios
de un cuerpo, que solo ahora
es considerado humano.
Rafa Marin
domingo, 4 de marzo de 2012
Compañero
Con tus ojeras y
la mirada de mil soles.
Con tu rictus de enfado,
con ademanes cansados
y siempre muy estudiados.
Te quejas compañero
del pasado mejor,
y no quieres ver...
no somos necesarios
los viejos dinosaurios.
Nuestra vida pasó
y ya son otros
los que empujan
desde abajo.
Rafa Marin
la mirada de mil soles.
Con tu rictus de enfado,
con ademanes cansados
y siempre muy estudiados.
Te quejas compañero
del pasado mejor,
y no quieres ver...
no somos necesarios
los viejos dinosaurios.
Nuestra vida pasó
y ya son otros
los que empujan
desde abajo.
Rafa Marin
miércoles, 29 de febrero de 2012
Que decir
Del fondo del sentimiento surgen como agujas los malos recuerdos.
Todavía veo nítido el momento
de su muerte,
de su muerte,
la agónica llamada de Franc
y los lamentos de fondo.
y los lamentos de fondo.
Mal viaje fue,
de contradicciones,
dolor de un lado
de contradicciones,
dolor de un lado
y del otro alivio,
se acabó su vida
y su sufrimiento.
se acabó su vida
y su sufrimiento.
Tantas horas derramándose
y perdiéndose en el tiempo.
y perdiéndose en el tiempo.
Nada que hacer y tanto que decir,
sin consuelo.
sin consuelo.
Abotargado por las dudas de un corazón
que se contradice una y otra vez
con los recuerdos.
con los recuerdos.
Se fue,
no se si consciente de ese viaje
sin retorno, o inconsciente,
aferrado a la extinta llama de la vida.
no se si consciente de ese viaje
sin retorno, o inconsciente,
aferrado a la extinta llama de la vida.
Rafa Marin.
martes, 28 de febrero de 2012
Hijo
Como no amarte,
si cada madrugada me llamas,
si tu primera protesta es una sonrisa
que me llena al instante.
Como no protegerte,
si me miras con ojos desolados,
si entre sollozos me abrazas
y el corazón se me parte.
Como ignorarte,
si me reclamas cada hora,
si vuelvo corriendo a casa
porque lejos de ti languidezco.
Rafa Marin
si cada madrugada me llamas,
si tu primera protesta es una sonrisa
que me llena al instante.
Como no protegerte,
si me miras con ojos desolados,
si entre sollozos me abrazas
y el corazón se me parte.
Como ignorarte,
si me reclamas cada hora,
si vuelvo corriendo a casa
porque lejos de ti languidezco.
Rafa Marin
lunes, 27 de febrero de 2012
Otoño
Es otoño y ya huele en las calles
a castañas asadas y empiñonadas.
Las hojas caídas dan color a las aceras.
La gente presurosa se refugia de aire
que rola de poniente, frío y seco.
Miro por la ventana al cielo azul y despejado.
Añoro mi infancia en el campo,
las mañanas de escarcha y los polos de leche.
Poco a poco el sol impone inexorable
su ley del mas fuerte y calienta
la mañana con lentas parsimonia.
Me preparo y salgo a la calle
afeitado y pulcro, como un dandy
que no tiene nada mejor que hacer.
Rafa Marin
a castañas asadas y empiñonadas.
Las hojas caídas dan color a las aceras.
La gente presurosa se refugia de aire
que rola de poniente, frío y seco.
Miro por la ventana al cielo azul y despejado.
Añoro mi infancia en el campo,
las mañanas de escarcha y los polos de leche.
Poco a poco el sol impone inexorable
su ley del mas fuerte y calienta
la mañana con lentas parsimonia.
Me preparo y salgo a la calle
afeitado y pulcro, como un dandy
que no tiene nada mejor que hacer.
Rafa Marin
Mujer de pescador
Vas caminando sola,
encogida, aferrada al chal,
tus pasos vacilantes
te llevan calle abajo.
La tarde triste y gris,
la humedad empapándolo todo
y a lo lejos las luces del puerto.
Llamaba a socorro el campanario
y temiendo lo peor vas
con los ojos llorosos
y la esperanza de un susto.
Triste vida, mujer de marinero;
miedo cada noche
y anhelando ese amanecer
que te traiga la luz y el sosiego.
Rafa Marin
encogida, aferrada al chal,
tus pasos vacilantes
te llevan calle abajo.
La tarde triste y gris,
la humedad empapándolo todo
y a lo lejos las luces del puerto.
Llamaba a socorro el campanario
y temiendo lo peor vas
con los ojos llorosos
y la esperanza de un susto.
Triste vida, mujer de marinero;
miedo cada noche
y anhelando ese amanecer
que te traiga la luz y el sosiego.
Rafa Marin
Mujer de pueblo
Mujer de pueblo,
enlutada y callada,
envejecida y cansada.
Vas viendo pasar la vida,
criando esos hijos
que fueron una bendición.
Sentada junto a la ventana
ves la calle callada
y a lo lejos su silueta.
Vuelve el marido a casa
con su cara arrugada
de tanto sol y escarcha.
Rafa Marin
enlutada y callada,
envejecida y cansada.
Vas viendo pasar la vida,
criando esos hijos
que fueron una bendición.
Sentada junto a la ventana
ves la calle callada
y a lo lejos su silueta.
Vuelve el marido a casa
con su cara arrugada
de tanto sol y escarcha.
Rafa Marin
sábado, 25 de febrero de 2012
Ronda nocturna
Llega la noche infinita de estrellas
y la pálida luz
desdibuja en gris
a todos los gatos
que ahora,
buscan calor entre
callejones,
por siempre húmedos y mugrientos.
Maldita madrugada
dolorosa,
de frío y lluvia y
seres siniestros.
Cuajada de cajas de cartón
y almas perdidas en el sueño,
nunca vieron al fin realizado.
Se encumbran las vendedoras,
las de la felicidad
efímera,
aferradas al polvo blanco.
Como fantasmas agobiados,
que por la calle
deambulan,
ociosos como
girones humanos.
Ofrecen el sueño
de amor quimérico,
otras venden sus
mustios cuerpos,
todas casi por nada.
Desde este fondo
oscuro,
que es mi razón, miro ajeno.
Ensimismado en la
noche,
como si el pudor
no me dejara
hoy levantar la
mirada.
y desde mis
adentros,
casi imploro
dejarme arrastrar,
ser el barrizal inerte y sucumbir.
Tras un rato de
mirar, avanzo,
abatido hacia la
otra luz;
la multicolor y
bullanguera.
Así me diluyo en
la corriente,
siempre ajena y de
cuerpos felices.
Rafa Marín
Mi vida
Mi vida.
Un devaneo histórico
que fuerzo en no recordar.
Mi vida, un sentir continuo
sensaciones totales,
de plena sabiduría del mundo
que me habita, de compartir
angustias y el amor de “una”,
histriónico ser dueño de mi.
Mi vida es un semanal ir
y venir; por no parecer malo.
Es escribir cosas que siento,
soñar un amor irreal.
Mi vida es no ver
para no tirar el tiempo,
es la música que me calma
y a la vez me inflama.
Mi vida son amigos
que no lo son y seres
que no conozco
y que me ayudan.
Mi vida es todo lo que poseo,
a la vez un cojín al que tiro,
pisoteo y siempre abrazo.
Mi vida, una casa que me gusta
y una escalera que me mata,
un trozo de mar y de azoteas,
un trabajo que odio
y un sueño que no espero.
Mi vida es dinero que derrocho
y quemo en vicios que no me ayudan
y que consiento con gusto.
Soy yo, irreal y dolido,
caprichoso y llorón.
que fuerzo en no recordar.
Mi vida, un sentir continuo
sensaciones totales,
de plena sabiduría del mundo
que me habita, de compartir
angustias y el amor de “una”,
histriónico ser dueño de mi.
Mi vida es un semanal ir
y venir; por no parecer malo.
Es escribir cosas que siento,
soñar un amor irreal.
Mi vida es no ver
para no tirar el tiempo,
es la música que me calma
y a la vez me inflama.
Mi vida son amigos
que no lo son y seres
que no conozco
y que me ayudan.
Mi vida es todo lo que poseo,
a la vez un cojín al que tiro,
pisoteo y siempre abrazo.
Mi vida, una casa que me gusta
y una escalera que me mata,
un trozo de mar y de azoteas,
un trabajo que odio
y un sueño que no espero.
Mi vida es dinero que derrocho
y quemo en vicios que no me ayudan
y que consiento con gusto.
Soy yo, irreal y dolido,
caprichoso y llorón.
Quizás sueño que fui
y que soy.
y que soy.
Mi vida es un dolor de pies,
una pereza que consiento
y cocinar.
Es amor solitario que no comparto
y que sin pensar donaría.
una pereza que consiento
y cocinar.
Es amor solitario que no comparto
y que sin pensar donaría.
Mi vida son consejos
que no me piden
y amores que se marcharon.
Mi vida es una mas,
de esas que se pierden
con el paso de los años.
Mi vida es la mas oscura soledad.
Mi vida es olvido y prisa,
playa y sol y lluvia y campo y todo.
que no me piden
y amores que se marcharon.
Mi vida es una mas,
de esas que se pierden
con el paso de los años.
Mi vida es la mas oscura soledad.
Mi vida es olvido y prisa,
playa y sol y lluvia y campo y todo.
Porque esta es mi vida;
lo único que tengo.
lo único que tengo.
Rafa Marín
viernes, 24 de febrero de 2012
Mamá
Pequeñita mujer,
a la que tanto quiero.
Que de pensar en perderte;
¡ me muero!.
Hoy quiero darte la gracias,
hoy, después de tanto tiempo.
Gracias por tu ser y mi vida,
por tus desvelos.
por defenderme cual leona;
Por ser ...
No se, por ser mi madre.
Ese ser que por mi
lo da todo.
Su trabajo y su salud,
su dinero.
Por eso quiero que hoy sea
un día para el recuerdo.
Un día que me alivie
de los remordimientos
por haberte hecho sufrir.
Que me exculpe de mis mentiras,
que me llene de alegría.
Un día que sea el más feliz.
Porque aunque nunca lo digo,
hoy lo voy a repetir.
Gracias por ser mi madre;
la mujer que más quiero
de este mundo
al que tanto debo.
Rafa Marin
Remordimiento
Se desliza entre mis pies como una sombra.
Se ciñe a mi memoria como una pesadilla.
Me seduce como una mujer dulce y hermosa.
Me tiene atrapado como a un pájaro en su jaula.
Soy un esclavo devoto y sumiso que pena en silencio.
Busco una salida y solo encuentro el comienzo
de este laberinto infinito y absurdo.
Rafa Marin.
Se ciñe a mi memoria como una pesadilla.
Me seduce como una mujer dulce y hermosa.
Me tiene atrapado como a un pájaro en su jaula.
Soy un esclavo devoto y sumiso que pena en silencio.
Busco una salida y solo encuentro el comienzo
de este laberinto infinito y absurdo.
Rafa Marin.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)