De estas arenas
negras
que se volvieron
tiempo.
De tanta falta
de libertad
y tantas orejas
de conejo.
De no querer las
luces
al final de
túneles viejos.
Cansado de
luchar,
callejones y sus
encierros,
donde la muerte
sabe esperar,
luz de laser
tiro certero.
Calles
imposibles de cruzar
y esquinas donde
se para el tiempo.
Mudos están los
gritos
de aquellos
niños muertos,
gritos...qué más
da,
consignas que no llenan huecos.
Rafa Marín
Hola Rafa te he leído unos cuantos y me gustaron todos, escribes muy bonito, un abrazo y que pases una feliz navidad en compañía de aquellos que te aman.
ResponderEliminarGracias Mercedes
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