Hoy os contemplo,
entre las brumas de un soleado día
que se volvió ayer.
Adiós silencioso parque,
adiós cielos amarillos...
¿cuándo os volveré a ver?
Adiós bancos partidos,
sin mendigos que querer.
Adiós prisas y anhelos
que no vais a volver.
¿Qué puedo hacer ya?
Búscame un trozo de tierra
en una linde junto al mar,
con nubes en el horizonte
que poder mirar.
Ya se acabó mi tiempo de huídas,
de cerrar estas duras heridas
y pagar por el daño que creé.
y mi ojos que se niegan a ver.
La persona seguirá aun viva,