Se me muere la voz, fe que tenía
osado canto de la mayor bravura,
escondida, murmullos tú querías
y nació libre para cantar tan pura.
No reniego de vos y de esa agonía
que desde el amanecer os tortura
volviendo la mañana noche oscura,
atrapada en mis alegres sinfonías.
No sientas por mi penas tan duras,
no reniego de vos y sus agonías
dulce diosa de la mayor bravura.
No es tu cuerpo ni tu voz, a fe mía
es un todo tú y los besos de locura
que mis labios de lo tuyos sentía.
Rafa Marín
Muy Bonita...
ResponderEliminarComo siempre escribes muy Bien!!...
No sé...Si es buena idea hacer mi comentario..!!
Es agradable saber que algo mío gusta.
EliminarGracias